El Ayuntamiento de Madrid quiere regular los pisos turísticos permitiendo el alquiler de viviendas de particulares durante un tope máximo que no podrá llegar a los 90 días al año, alquiler enmarcado dentro de la economía colaborativa. Más allá de ese plazo, exigirán licencias para poder ser alquilados al adquirir un tinte de "alojamiento profesional".
A partir de enero se podrán tramitar unas "mil licencias", motivo por el que el consistorio hará un refuerzo de la Agencia de Licencias para dar respuesta a aquellos particulares que quieran alquilar sus pisos al turismo durante más de tres meses al año. Las futuras multas no han sido aún abordadas por el ayuntamiento, centrado ahora en difundir esta normativa con la que esperan "concitar consenso".
Lo ha anunciado este miércoles la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, en un desayuno informativo, donde ha explicado que estas medidas responden a una competencia municipal, la interpretación de las normas recogidas en el Plan General de Ordenación Urbana de 1997. Esta propuesta pasará hoy mismo por la Comisión de Seguimiento de Interpretación del PGOU, órgano que hasta el momento "no se había utilizado sistemáticamente".
Como en otras ciudades europeas
Carmena ha contestado que no necesitan autorización por parte de la comunidad para aplicar estas medidas porque lo que hace el ayuntamiento es "una interpretación de la norma y esa es una competencia específica del ayuntamiento". Además el consistorio realizará un censo de viviendas turísticas y un plan especial que determinará dónde puede haber más establecimientos hoteleros en función de mediciones relativas a las calles, la movilidad o los ya existentes.
La alcaldesa ha recordado que la regulación última de la actividad turística es competencia de la comunidad, vía decreto, pero ha apuntado que esa regulación "hay que concretarla" en la ciudad. Se hará con estas medidas, que siguen la línea de otras ciudades europeas de compatibilizar la vivienda personal y la profesional. "No queremos que esto sea una declaración sino un plan de acción", ha remachado.