BBVA ha cerrado un acuerdo con el fondo estadounidense Cerberus para venderle unos 12.000 millones de euros en activos inmobiliarios. Se trata de una de las mayores desinversiones en el sector, por la que la entidad se prevé que ingrese entre 3.500 y 4.000 millones, ya que el descuento de los activos traspasados será de casi el 60%. Ambas compañías crearán una sociedad conjunta con dos tercios de la participación en manos de Cerberus.
Las negociaciones han durado meses y, según publica este martes Voz Pópuli, podrían culminar esta semana. Se trata de la segunda mayor operación de traspaso de activos inmobiliarios del año, por detrás de la de Santander, que vendió a Blackstone unos 30.000 millones de los activos heredados con la compra de Banco Popular. En ese caso, el descuento aplicado fue del 67% y el fondo pagó 5.100 millones.
El acuerdo necesita la aprobación por parte del Fondo de Garantía de Depósitos antes de materializarse.