Los trabajadores del autobús lanzadera que une las terminales T1 y T2 del aeropuerto de El Prat han iniciado este lunes una huelga que se alargará hasta el jueves, 30 de noviembre. Los servicios mínimos impuestos por la Generalitat son del 50% durante todas las jornadas de paros.

Los comités de empresa de las compañías que forman la UTE (Unión Temporal de Empresas) que controla el servicio, Hispano Igualadina, E. Monforte, Castromil y Globalia, han convocado la huelga. Aseguran que la sociedad propietaria de las compañías, Monbus, pretende despedir a los empleados de la línea regular entre terminales del aeropuerto de Barcelona.

La plantilla está formada por 16 personas. Según la UGT, la intención de Monbus es echarlas y contratar el 1 de diciembre a trabajadores con menos experiencia –sin antigüedad y con menos derechos–. En esta fecha es cuando entra en vigor la concesión a otra UTE, controlada por el mismo grupo. El sindicato argumenta que Monbus incumple el convenio colectivo de transporte de viajeros por carretera.