Endesa ha comunicado hoy a sus accionistas que dedicará todos sus beneficios al pago de dividendos hasta 2020. Estima que repartirá 5.900 millones en los próximos cuatro años, un periodo en el que prevé “condiciones adversas” del mercado que le han obligado a actualizar el plan estratégico del grupo. Avisa que sus beneficios serán menores y, de forma consecuente, deberá pasar la tijera a sus previsiones económicas. 

La nueva hoja de ruta de la compañía ha sido remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este miércoles antes de la apertura de la sesión. Para este año indica que el dividendo mínimo será de 1,32 euros por acción, por debajo de los 1,33 euros que abonó en 2016. El próximo ejercicio alcanzará el 1,33 euros, más del 6% por debajo de los 1,42 previstos en el plan anterior.

Mantener los niveles de enduedamiento

La energética presidida por Borja Prado no da estimaciones de los dividendos que abonará en 2019 y 2020. Se escudan en que la capacidad de distribución dependerá de numerosos factores, tanto de los beneficios como de las reservas distribuibles y que en estos momentos no es pertinente hacer una estimación de este tipo.

Endesa, cuyo principal accionista es la italiana Enel (tiene el 70% del capital, hecho que le proporciona unos ingresos de más de 4.100 millones por las retribuciones de los títulos), indica en esta hoja de ruta que procurará un nivel de caja significativo. Asegura que le permitirá mantener sus niveles de endeudamiento y, en la medida en que sea posible, maximizar la remuneración de los accionistas.

“El objetivo es asegurar la sostenibilidad del proyecto empresarial”, mantiene.

Recorte de beneficios

El nuevo plan de la compañía estima un crecimiento medio anual de las ganancias de aproximadamente el 6%. Pasará de los 1.400 millones a los 1.600 en 2019. Pero empeora el escenario para los próximos dos años respecto a la hoja de ruta anterior.

Sitúa el beneficio del próximo ejercicio de 1.400 millones frente a los 1.500 previstos hasta la fecha. Esta cifra no se alcanzaría hasta 2019, cuando la estimación anterior era llegar a los 1.700 millones.

Menos resultado bruto

También se recorta el resultado bruto de explotación (ebitda). Vaticina un crecimiento medio anual del 4% de 2017 a 2020, desde los 3.400 para el ejercicio en curso hasta los 3.700 que se alcanzarían en cuatro años. Pero retrasa en un año sus objetivos.

No se llegará hasta los 3.500 millones hasta 2019 y esperará hasta 2020 para llegar a los 3.700 millones, cifras que antes preveía alcanzar en 2018 y 2019, respectivamente.

Inversiones

En cuanto a las inversiones en bienes de capital (capex), reserva 5.000 millones, el 6,4% más que en la hoja de ruta anterior. De esta cifra, el 56% (2.800 millones) se dedicarán al crecimiento frente al 44% previsto hasta la fecha.

Asimismo, se perfilan unas inversiones por valor de 1.300 millones en digitalización en los próximos cuatro años. Una iniciativa que supondrá ahorrar 250 millones.

Apuesta por las renovables

Las renovables serán otro de los pilares del grupo y se destinarán 900 millones para desarrollar 939 megavatios de capacidad adicional. Cifra que incluye los 879 MW adjudicados en las subastas del ejercicio en curso.

La capacidad de energía verde del grupo pasará de los 6.388 MW de 2017 a los 7.353 MW (con 399 MW solares y 540 MW eólicos). Se prevé que estas nuevas inversiones tengan una contribución de en torno a 80 millones al beneficio bruto a partir de 2020.

Carbón y nucleares

En esta línea, Endesa apuesta por abandonar el carbón en 2050 y mantener la energía nuclear a largo plazo para garantizar la seguridad del suministro. También preservará el carbón eficiente para “evitar mayores emisiones y costes del sistema”.

Realizará inversiones por 400 millones de euros hasta 2020 destinadas a la seguridad y operación a largo plazo de su capacidad nuclear y de 300 millones de euros para las inversiones medioambientales en sus térmicas.

Avance de los clientes y movilidad eléctrica

En lo que se refiere a su cartera de clientes, Endesa prevé que se mantenga estable a lo largo del periodo. Espera llegar a los 10,9 millones en el caso de la electricidad a final de 2020, con un importante crecimiento del mercado liberalizado, hasta los 6,9 millones. En su negocio de gas, prevé llegar a los 1,7 millones.

Finalmente, apuesta por promover la movilidad eléctrica a través de soluciones de recarga. Prevé desarrollar una red propia con 600 estaciones propias en 2020.