CEOE, Cepyme, CCOO y UGT se han sentado de nuevo para negociar una revalorización de los salarios en España. A diferencia de las negociaciones que rompieron para revisar las retribuciones en el ejercicio en curso, ahora retoman el debate para llegar a un pacto en tres meses. Debería entrar en vigor en 2018.
El calendario de encuentros de la comisión de seguimiento del III Acuerdo de Negociación Colectiva se fijó este lunes, sin ir más allá. Se espera entrar en materia en un encuentro convocado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, encabezado por Fátima Báñez, este martes, 19 de septiembre. Es el Gobierno el que llevará la iniciativa ante los agentes sociales, aunque se prevé que aborde cuestiones como el intento de pactar la política retributiva o les consulte sobre la revalorización del salario mínimo interprofesional.
Báñez ha convocado el encuentro bajo el paraguas de “analizar la situación actual del diálogo social”. Estarán presentes en esa mesa el presidente de CEOE, Juan Rosell; el de Cepyme, Antonio Garamendi; y los secretarios generales de CCOO, Unai Sordo, y UGT, Pepe Álvarez.
Efecto negativo sobre el PIB
En cuanto al pacto de los salarios, los sindicatos ya han exigido que no se debe incurrir en los mismos errores que la negociación anterior. Piden que se aborde la revalorización como un “estímulo” al consumo que dinamizará la actividad económica y, en última instancia, mejorará el empleo. Hacen hincapié en el estancamiento en la creación de puestos de trabajo en los dos últimos meses y en la precariedad de la nueva contratación.
Recuerdan que, al final, esto pasa factura a la hasta ahora evolución favorable del PIB. Argumentan que el crecimiento económico se frenará si las familias carecen de poder adquisitivo.
Líneas rojas
Por otro lado, la patronal mantiene las mismas líneas rojas que imposibilitaron llegar a un pacto sobre salarios antes de verano: la incorporación de cláusulas de garantía salarial negociadas en convenio que protejan los salarios frente a desviaciones del IPC y cierta vinculación de las retribuciones a la productividad de las compañías.
En cuanto a las cifras de la revalorización, los sindicatos insisten en que se deben incluir subidas por encima del IPC, que actualmente se sitúa en el 1,6%. La patronal es más discreta con la cifra de partida en la nueva negociación.
El principal cambio en la negociación que se emprende esta semana está en los miembros de la mesa. Ya ha concluido la última renovación que estaba pendiente, la de la secretaría general de CCOO. Con la incorporación de Sordo, los procesos internos de los agentes sociales tampoco afectarán a una negociación colectiva más compleja que las habituales y marcada por el fracaso del acuerdo salarial de 2017.