Facua ha denunciado a Ryanair ante la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA) tras el anuncio de que cancelará unos 2.000 vuelos en toda Europa a lo largo de las próximas seis semanas. Entre 40 o 50 vuelos al día para “recuperar la puntualidad”, según el grupo, debido a las huelgas, condiciones meteorológicas y el incremento de vacaciones de pilotos y personal de cabina.
La asociación de consumidores reclama al agencia, que depende del Ministerio de Fomento, que abra un expediente sancionador por unos argumentos que considera que son “inaceptables”. Pide que se cumpla la norma vigente ante la denegación del embarque y reciban por parte de Ryanair la atención y compensación necesaria.
Legislación vigente
De entrada, que se les “informe de la cancelación al menos con dos semanas de antelación”. Y que ras el aviso, se les “ofrezca un transporte alternativo que les permita salir con no más de dos horas de antelación respecto a la hora de salida prevista y llegar a su destino final con menos de cuatro horas de retraso”.
Por último, que la advertencia llegue "con menos de siete días de antelación con respecto a la hora de salida prevista y se les ofrezca tomar otro vuelo que les permita salir con no más de una hora de antelación con respecto a la hora de salida y llegar a su destino final con menos de dos horas de retraso con respecto a la hora de llegada".
Reclamación de daños y perjuicios
Facua sostiene que si no se cumple con este reglamento, Ryanair deberá ofrecer compensaciones. Incluso económicas, con el reembolso íntegro del billete si no se reubica al afectado en un vuelo alternativo.
Denuncia asimismo que la low cost irlandesa no informa de forma adecuada a los usuarios afectados sobre sus derechos legales. Reivindica los derechos que otorga a los pasajeros la legislación europea y recuerda que el consumidor también puede reclamar daños y perjuicios por la pérdida de otras conexiones aéreas o gastos de hotel y comida que haya tenido que afrontar por culpa de la cancelación del trayecto.
Causas organizativas internas
La asociación subraya que Ryanair justifica sus cancelaciones en base a circunstancias que son previsibles, y en ningún caso de fuerza mayor. Se trata, sostiene, de causas que obedecen a cuestiones organizativas de nivel interno, achacables al propio funcionamiento de la aerolínea, cuyas consecuencias en ningún caso deben recaer sobre el cliente.