Colonial registró un beneficio neto de 437 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un incremento del 90% respecto al mismo periodo del año anterior, impulsado por el efecto fiscal positivo derivado de su conversión en socimi.
Las ganancias de la compañía también reflejan la revalorización de su cartera activos inmobiliarios, integrada por edificios de oficinas ubicados en el centro de Madrid, Barcelona y París.
Cartera de 8.666 millones
Al cierre del pasado mes de junio, esta cartera presentaba un valor de mercado de 8.666 millones de euros, un 7% más que un año antes.
Colonial registró ingresos por el alquiler de estos activos de 141 millones de euros en el primer semestre, un 3% más. De su lado, el beneficio bruto de explotación (Ebitda), se mantuvo en 109 millones.
En términos operativos, durante la primera mitad del año, la socimi que preside Juan José Brugera firmó 55 nuevos contratos de alquiler, que generarán rentas anuales de 25 millones de euros. Así, su cartera actualmente presenta una ocupación media del 96%.
Deuda de 3.318 millones
En el capítulo financiero, Colonial presentaba a junio un deuda neta de 3.318 millones, importe que representa un 36% del valor total de su cartera de activos.
Cuando una inmobiliaria se transforma en una sociedad anónima cotizada de inversión inmobiliaria (socimi) pasa a disfrutar de un tratamiento fiscal muy favorable, como ocurre en la mayor parte de los países de Europa.
Su fin social debe ser la adquisición y la promoción de inmuebles urbanos destinados al alquiler. No pagan por el impuesto de sociedades, y sus dividendos tributan al 19% si quien los recibe tiene más del 5% del capital de la socimi, y al 10% si tiene menos.