Los grupos inversores Cambium y Glassyfy se han unido para presentar una propuesta conjunta para hacerse con el control de la empresa vasca fabricante de vidrio de mesa Vicrila, en concurso de acreedores desde octubre del año pasado y al borde de la liquidación al fracasar todas las operaciones de reflotamiento intentadas hasta ahora.
La propuesta conjunta de Cambium y Glassyfy se produce dos meses después de que el grupo Sainberg retirara su oferta de compra, que ya había sido aceptada por el conjunto de los trabajadores y la administración concursal de la empresa vidriera.
Dos ofertas
Después del fracaso del intento de Sainberg, se han presentado tres nuevas ofertas respaldadas por Cambium y Grassyfly, cada una hasta ahora por su lado, y por Gestiber. Fuentes financieras que siguen el proceso de salvamento de Vicrila señalan que se están volviendo a producir las presiones vividas en los meses pasados por parte del antiguo director general de Vicrila, Luis Fernández, a favor de una de las ofertas, en concreto la de Gestiber, en detrimento de las otras dos ofertas mediante la difusión de informaciones falsas que impiden a los trabajadores tomar la decisión adecuada.
Esas fuentes señalan que la propuesta de Gestiber no satisface las exigencias de financiación de los acreedores de Vicrila; unos acreedores que desconfían del papel de Luis Fernández en toda la operación ya que le hacen responsable de la situación de ruina a la que ha llevado a Vicrila bajo su dirección. La administración concursal debe ahora tomar una decisión entre la propuesta de Cambium-Grassyfy y la de Gestiber.
Inversión de más de 20 millones
La plan presentado por Cambium y Grassyfy incluye una inversión de 18 millones de euros en los próximos tres años, más una inversión recurrente de otros dos millones de euros en años sucesivos para actualización de la infraestructura industrial de la fábrica, más otra inversión aún sin determinar para un segundo horno cuando el actual supere el 65% de capacidad.
Esta nueva oferta incluye un plan de remodelación de la fábrica de Vicrila para convertirla en una industria de vidrio de mesa moderna especializada en Food Service que la situaría como la más competitiva de Europa.
Condiciones laborales
La propuesta conjunta prevé la subrogación de 211 trabajadores de los 300 que componen la plantilla de Vicrila. A ello une una aportación de dos millones de euros al FOGASA para el tratamiento de los excedentes mediante prejubilaciones y bajas incentivadas. El plan incluye una reducción salarial del 15%, que se aplicaría únicamente a los salarios superiores a 20.000 euros anuales, y un incremento de las horas trabajadas a 1.740 anuales de trabajo efectivo. Cambium y Glassyfy proponen un nuevo marco laborar para reestructurar las condiciones laborales, con el compromiso de no presentar expedientes de regulación de empleo en cinco años siempre que el EBITDA se mantenga por encima de los dos millones de euros.
El plan de ambos grupos de inversión prevé que en cinco años se pueda pasar de una facturación de 25 millones a 40 millones y que de un EBITDA negativo actual se superen los cinco millones en ese plazo.
Los actores implicados
Cambium es un grupo inversor de capital privado especializado en reflotar empresas en dificultad. Ha participado en la reestructuración de empresas como Verallia, North Sails, Spumador, La Casera, American Rice, Majorica, Mineraqua, entre otras. Glassyfy, está ligada a la familia Delclaux, con amplias vinculaciones históricas al negocio del vidrio en el País Vasco.
Vicrila (Vidriera y Cristalería de Lamiaco) entró en concurso de acreedores en octubre pasado con un pasivo de más de 70 millones de euros y acumula pérdidas por más de 50 millones de euros. Se fundó en 1890 y es de las pocas empresas centenarias vascas supervivientes. Desde 1970 ha estado controlada por multinacionales francesas como ARC o Saint Gobain. En 2009 fue adquirida por un grupo de directivos de la propia empresa.