El consumo de España resistirá a la eventual subida de tipos del Banco Central Europeo. Así lo asegura el regulador financiero del país en el informe anual publicado este martes. Un documento en el que indica que el “notable desendeudamiento” de las familias en los últimos años ha contribuido a que se modere el efecto negativo de los intereses en la capacidad de gasto de los hogares.
Estima que los efectos de la revisión del programa de dinamización macroeconómica del Eurosistema impulsado por Mario Draghi serán “reducidos”. En otras palabras, el PIB español sufrirá menos por un cambio de signo que el Banco de España sitúa en el horizonte 2017-2019. Dibuja un escenario de subida “gradual y moderado”. Los servicios de estudios del BBVA son más precisos. Prevén la revisión al alza de los tipos a finales de 2018.
Tramos de edad más propensos al consumo
Un plazo de tiempo relativamente corto. La institución presidida por Luis María Linde indica que la incidencia sería negativa en los hogares cuyo cabeza de familia está en los tramos bajos de edad. Son los más propensos al consumo.
En contraposición, los impactos serían positivos en los grupos de mayor edad. La prevalencia de deuda es menor y tampoco tienen un papel destacable en la evolución del consumo.
Efecto sobre las empresas y administraciones
Si el incremento fuera de un punto porcentual, algo que la institución considera factible hasta 2019, supondría un aumento del 0,13% en la carga de intereses de la economía española. Subiría al 0,27% si la subida se produce en los tipos a largo plazo.
La misma subida en corte se traduciría en un repunte del 0,37% del coste en las administraciones públicas. El efecto en las empresas sería mayor, hasta el 1,66% más de carga financiera sobre su excedente bruto de explotación.
Compensación en el ahorro privado
La evolución sobre las familias es más neutro. El Banco de España prevé un efecto neto del 0,15%. Los mayores pagos por los intereses asociados a las deudas equivaldrían al 0,7% de la renta bruta disponible pero se compensarían por el aumento de la remuneración de los depósitos, del 0,55%.