Los incentivos para comprar una vivienda son mayores que nunca, ya que representa una inversión segura en un momento en el que tener los ahorros en el banco apenas genera beneficios.

En este contexto favorable, hace justamente un año nació Cliventa, la única agencia inmobiliaria digital del mercado español y que no cobra comisiones por las ventas. Su modelo de negocio se basa en una tarifa plana que fija el cliente, inferior a 1.000 euros por cada transacción: “Nuestros clientes pagan por los servicios que necesitan. El plan de venta tiene un precio fijo, y ellos deciden cuándo pagarlo: 535 euros al contratar o 875 euros al vender (pago aplazado)”, explica Ignacio González, cofundador de Cliventa, a instancias de Crónica Global.

Esta ausencia de comisiones con respecto a las agencias tradicionales supone un “ahorro” estimado de 17.000 euros para el cliente, dado que la tarifa a pagar a la inmobiliaria por contratar sus servicios no depende ni de las condiciones de la vivienda ni del montante por el que se ha realizado la venta.

Ventas inferiores a tres meses

Desde Cliventa sacan pecho de que de media consiguen un comprador cada dos meses y seis días. Este tiempo se recorta todavía más en las viviendas que gestionan en núcleos urbanos como Madrid o Barcelona, que ostenta una media de dos semanas para cerrar el negocio.

A modo de ilustración, desde la start up catalana aseveran que su récord se sitúa en la venta de 35 viviendas en menos de dos meses.

Un 96% de éxito en el precio de salida

Otro aspecto que les diferencia de las inmobiliarias tradicionales es que, al no ir a éxito por venta, “garantizan una inversión” en cada uno de los pisos de los clientes: “Aportamos transparencia al proceso, ya que el vendedor sabe en todo momento por lo que está pagando y sigue el progreso de su venta desde su cuenta”, relata González.

El 96% de las transacciones que tienen en su haber se han producido sin variar el precio de salida de mercado que habían fijado los clientes. “El particular no debe rebajar el precio más de la cuenta para vender su vivienda”, sostiene el fundador de la plataforma.

Compradores con capacidad real para pagar

Cliventa envía un experto local, arquitecto y certificador, a realizar fotografías y plano de la vivienda, certificado energético y cédula de habitabilidad, tramita una valoración detallada del precio de venta recomendado, publica el anuncio de venta en más de 50 portales y atiende las llamadas y correos de los interesados para presentarle al vendedor solamente compradores con capacidad real para pagar.

Finalmente, un asesor personal acompaña al vendedor durante la negociación y formalización, ofreciéndole el soporte y la documentación legal necesaria.

Previsiones

Con tan solo un año a sus espaldas, esta start up catalana acaba de aterrizar en Valencia. La comunidad autónoma se sitúo en el pasado mes de enero en el top 3 de las regiones con más compraventas de vivienda por 100.000 habitantes.

Sus previsiones son alcanzar más de 400 clientes a final de 2017 y más de 150 operaciones de compraventa. Además de seguir su expansión estando presentes en un total de seis provincias para finales de año.