Nyesa Valores Corporación nació en 2008 como la gran inmobiliaria zaragozana. Nueve años más tarde, la cotización del grupo está suspendida --ocurrió en septiembre de 2011-- y su valor se hunde cada vez más por la polémica gestión de su anterior cúpula. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) les impuso este lunes la enésima sanción económica.
En esta ocasión, queda probado que manipuló el mercado para incrementar el precio de las acciones de la compañía entre el 6 y el 22 de septiembre de 2010. Jesús Peralta, consejero hasta 2015 de la compañía, deberá pagar 50.000 euros por ello y José Luis Bartibás, el entonces presidente, desembolsará el doble. Su multa asciende a los 100.000 euros.
Multas a los Bartibás
No es la primera ocasión que el empresario, que durante años fue una referencia en Aragón, debe sacar la cartera para pagar una sanción del regulador del mercado. Hace un año abonó 80.000 euros por incumplir su “deber de comunicación y difusión de participaciones significativas como consejero” de Nyesa en el mismo periodo, por los que tuvo que pagar otros 10.000 euros extra.
Con Ibesós, la empresa familiar que se fusionó con Nyesa y dio origen a la compañía actual, abonó en 2010 otra sanción de 125.000 euros. En este caso, fue una penalización familiar. Recibieron la misma sanción su padre y predecesor en la dirección de la inmobiliaria, José Luis Bartibás Larragay, y sus dos hermanos, Carlos y Roberto, por incumplir las normativa de las ofertas públicas de adquisición obligatoria.
Ampliación de capital
Nyesa Valores cerró el primer trimestre con una ampliación de capital de 6,8 millones de euros, el importe de la prima de emisión de más de 44.000 acciones que se pusieron en circulación.
Los recibió con la compensación de créditos concursales que contrajo al reconocer su quiebra en 2012, casi un año después de que Juan Manuel Vallejo relevara a Bartbiás en el cargo. Los préstamos compensados ascendían a 661.700 euros.
Concurso de acreedores
La compañía solicitó el concurso voluntario por ser incapaz de hacer frente a los más de 650 millones de deuda que arrastraba. Llegó a un acuerdo con los acreedores dos años más tarde mediante la capitalización de la deuda (Banco Popular se quedó más del 13% de la titularidad) y desde entonces su actual dirección intenta reflotar la compañía.
Para ello, mantiene la venta de activos. El último se firmó el pasado 31 de marzo, cuando hizo caja con el Hotel Macarena de Sevilla, situado junto al Parlamento de Andalucía. La operación supuso una “mejora de más de 11,1 millones de euros de patrimonio neto del grupo” y redujo su endeudamiento financiero en más de 38,4 millones, tal y como comunicó al regulador. Se firmó para cumplir con el plan de pagos del convenio de acreedores.
Nyesa Valores cerró 2016 con algo más de 16 millones de euros de beneficios frente a los 105,1 millones del ejercicio anterior, según los datos de la CNMV.