Los vecinos de Ciutat Vella y Sant Martí protestan desde hace meses contra los pisos turísticos ilegales, por las molestias que les causan. Ahora, los hoteleros han dicho basta y han anunciado que también estudiarán medidas legales contra los alojamientos que no tengan licencia.
El presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona (GHB), Manel Casals, explica a Metrópoli Abierta que a finales de 2012 la entidad presionó a las administraciones para que actuaran contra los pisos turísticos ilegales. Al no experimentar reacción alguna pusieron a personal del propio gremio a buscar por internet pisos turísticos.
Desde 2012 han denunciado ante el Ayuntamiento de Barcelona 1.961 pisos turísticos ilegales y 53 embarcaciones, la mayoría en el Port Olímpic, que se ofrecen como alojamiento por días.
Las cifras del GHB sitúan en más de 10.000 el número de pisos turísticos ilegales en Barcelona, que ofrecen unas 40.000 plazas. Los hoteles consideran que se trata de competencia desleal y un fraude fiscal a gran escala.