La retirada de Zurich de Cataluña ha abierto una guerra para asegurar a los médicos catalanes. La multinacional aseguradora se ausentará de la adjudicación del nuevo contrato que lanzará el Consejo de Colegios de Médicos en junio. Ello dejará un pastel de 12 millones de euros para otras grandes firmas, con las pequeñas corredurías pisándoles los talones para cambiar el sistema.

Según ha explicado fuentes no oficiales del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona (COMB), el mayor del territorio, la marcha del grupo suizo plantea otro escenario. "Podría ser que grandes grupos como AIG, aseguradoras especializadas como WR Berkley o la mutua A.M.A. u otras vinculadas a bancos entren en la pugna. Pero será difícil", explican.

"El premio de cobrar 25.000 primas --los facultativos que cubre el contrato-- no compensará el riesgo de pagar compensaciones por errores médicos, que ahora cuestan el doble". El especialista se refiere a la Ley 35/2015 de reforma del sistema de valoración de los daños. El texto, en vigor desde el 1 de enero de 2016, fija pagos más cuantiosos que los pactados hasta esa fecha.

Corredurías

A esta dificultad para asegurar a los galenos catalanes, que no pueden ejercer sin contratar una póliza, se le suma otra. "Las corredurías de seguros. Bregan por gestionar los siniestros y juegan un rol complejo, cuanto menos", explica un portavoz de Servicios Jurídicos Verdun, un bufete vinculado al Defensor del Paciente.

Otro compañero letrado aporta más información sobre estos pequeños actores. "Las corredurías no juegan en principio ningún papel, sino que se están haciendo esfuerzos para que se tramiten las reclamaciones por el Colegio de Médicos creando una división especializada", alerta el abogado Roberto Toro Pujol, también especializado en errores médicos.

Así, empresas como Medicorasse o Confide luchan por complementar o incluso hurtar asegurados al COMB y resto de colegios provinciales.

Presión social

La empresa que reemplace a Zurich como mayor proveedor de pólizas de responsabilidad profesional en Cataluña se enfrentará a otro factor: la presión ciudadana. El movimiento social Que no pase más busca endurecer el marco de regulación de las negligencias médicas.

"Tenemos tres peticiones principales: la eliminación de las costas en procedimientos judiciales por mala praxis; ampliar los plazos de prescripción de los delitos y pedir la creación de un organismo de mediación", explica una letrada de Servicios Jurídicos Verdun, que ha diseñado la modificación normativa.

En la actualidad, un 90% de las 300 reclamaciones por mala praxis médica que se ponen anualmente en Cataluña se pacta antes de llegar al tribunal. "Si la ley es más estricta el riesgo será mayor y las primas seguramente también aumenten", concluye un experto que prefiere no revelar su nombre.