El presidente de Banco Sabadell pide “más gestos” a Rajoy para Cataluña

El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, ve bien el plan de inversiones que el Gobierno central anunció este martes para Cataluña. “Es un gesto positivo pero no suficiente; es necesaria una secuencia permanente de hechos que deje huella en el país y entre los catalanes”, ha manifestado en un encuentro con la prensa previo a la junta general de accionistas de la entidad que tendrá lugar este jueves en su Sabadell (Barcelona) natal.

“Con solo esto no se arregla la tensión”, ha indicado, “pero va en el sentido positivo”. “Vale la pena trabajar en ello y olvidarnos de otras cosas”, ha declarado en relación al proceso independentista.

En otro orden, el banquero recuerda las perspectivas macroeconómicas al alza que se han reportado en los tres primeros meses del año y prevé que las economías española y catalana se levanten en dos o tres años.

Buscar nuevos puntos de encuentro

De vuelta a la situación catalana, según Oliu el Ejecutivo de Mariano Rajoy deberá intensificar los gestos para reconducirla: “Debemos buscar otras formas de encuentro para seguir la ola del empuje que mejore el crecimiento y el bienestar”.

Oliu espera que el proyecto presupuestario estatal ponga cifras a la resolución de los “déficits de infraestructuras que se arrastran” en Cataluña, como la renovación de Cercanías, el impulso definitivo al Corredor Mediterráneo o el de autopistas y carreteras a media construcción, o proyectadas pero no ejecutadas, entre otras.

“La crisis paró la obra pública y es bueno que los catalanes sepan que el Gobierno es consciente de los retos que existen en esta materia”. El presidente de Banco Sabadell ha advertido de que estos no se pueden volver a plantear “en dos o tres años” como ha ocurrido hasta la fecha.

Sacrificio del resto de comunidades

Sobre las quejas de otros gobiernos autonómicos por la lluvia de millones anunciada para Cataluña, Oliu ha sido claro. Mantiene que la resolución al reto catalán pasa porque “alguien se sacrifique”.

Explica que así se lo hizo saber un grupo de empresarios gallegos con los que se reunió hace unas fechas. “Nos dijeron que los gallegos tenían claro que se debían sacrificar en bien de la resolución del problema”. “Lo importante ahora es la resolución del problema”, ha sentenciado.