El Juzgado Mercantil número 1 de Madrid ha admitido a trámite y declarado el concurso voluntario que instó la empresa Play Wireless, del Grupo Zed.
Esta firma acumula unas deudas de más de 10 millones. Entre 2014 y 2015 contabilizó unas pérdidas de 6,3 millones. Este desfase provocó que sus fondos propios entren en terreno negativo.
El tejido empresarial
Play Wireless pertenece al Grupo Zed Worldwide, dedicado al desarrollo de soluciones tecnológicas para teléfonos móviles y el marketing digital. Entre sus creaciones figura el exitoso videojuego Commandos y la película animada Planet 51.
En la cima del entramado empresarial figura la sociedad holandesa Zed +, cuyo capital domina el fundador Javier Pérez Dolset y su familia. Zed + controla el 77% de Zed Worldwide, de Las Rozas (Madrid), que es el mascarón de proa del grupo y cabecera de un amplísimo repertorio de filiales establecidas en los cinco continentes.
Planeta y Juan Abelló
Planeta posee el 20% de Zed Worldwide, adquirido en 2006 previo desembolso de 150 millones. En el accionariado también está presente el multimillonario financiero y terrateniente Juan Abelló.
Con Play Wireless son ya cinco las compañías de Grupo Zed que han entrado en insolvencia, a saber: la citada Zed Worldwide; su filial Zed Worldwide Holdings; y dos empresas dependientes de esta última, Ocio Factory Time y Alvento Soluciones. Las deudas conjuntas superan los 200 millones.
Guerra accionarial
La cascada de fallidos se produce de forma paralela a la guerra accionarial que se ha desatado en su seno. Planeta y otros socios pretenden averiguar la situación real del grupo, pero se les niega constantemente la información.
Zed Worldwide ha convocado y suspendido hasta tres juntas de accionistas de forma consecutiva durante los meses pasados. Finalmente, en enero último se celebró y los inversores acordaron la destitución del presidente Pérez Dolset. En Holanda, un tribunal también lo apartó de la administración de Zed + y colocó en su lugar a un interventor judicial.
Grupo Zed llegó a valorarse en mil millones de euros hace pocos años, pero sus actuales problemas han hundido su tasación.