Igual que en la serie de televisión que se emitió entre 1985 y 1992, los problemas crecen en relación al contencioso que mantienen Gas Natural Fenosa y su filial colombiana, Electricaribe, intervenida el 15 de noviembre.

Los administradores actuales de la energética en Colombia han comenzado a cortar el suministro a las alcaldías que deben dinero. Y amenazan con suspender los contratos con hospitales y colegios. La compañía española jamás llegó a esta situación cuando tenía el control –que negocia recuperar— de Electricaribe, a pesar de los millonarios impagos, casi todos del sector público.

Seis alcaldías afectadas

Electricaribe ha suspendido el servicio en seis alcaldías de la costa atlántica, las más morosa, en las últimas dos semanas. La filial intervenida de Gas Natural tiene la lupa sobre otros 277 morosos, según informa el medio local El Heraldo. La deuda de la Administración con la energética ha crecido un 33% en un año.

El presidente de la intervenida desde el 15 de noviembre, Edgardo Sojo, defiende que el corte de suministro es una “estrategia” para recuperar parte del dinero impagado. En la costa atlántica, Electricaribe atiende a 2,5 millones de usuarios regulados. La práctica totalidad de los municipios de la Región Caribe tiene deudas.

Amenazas a hospitales y colegios

En esta línea, lamenta la falta de ayuda de gobernadores y alcaldes. El todos ponen implica un cambio de mentalidad en el poder. Los acuerdos de pago suscritos entre la empresa y las entidades “es como si no existieran”.

La ley, sin embargo, impide los cortes de luz en hospitales y colegios, aunque el mismo Sojo presiona a los centros con la amenaza pública de finalizar los contratos: “Electricaribe está en crisis, no tiene por qué seguir asumiendo estas deudas”.

Negociación

Las medidas, por ahora, han dado algún resultado. Por ejemplo, en Atlántico, el gobernador ha anunciado el pago de las deudas de los hospitales Cari y el departamental de Sabanalarga. Como en todos lados, hay “buena y mala paga”. Es decir, los hay cumplidores y los hay que no.

Entretanto, Colombia y Gas Natural negocian la mejor solución al conflicto. La cotizada española tiene entre sus cartas acudir a un arbitraje internacional para recuperar Electricaribe, de la que posee el 85%.