Las discotecas catalanas tendrán un nuevo protocolo de inspección de los Mossos. La policía autonómica ha informado a Fecasarm (Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales) de nuevas medidas en la inspección a locales de ocio nocturno. El procedimiento incluye una hoja de puntos progresivos para cerciorarse de si los locales cumplen con la legalidad.
"El 7 de febrero hubo una reunión informativa entre Fecasarm y la Unidad de Espectáculos de los Mossos para presentar las nuevas actas. Tras la reunión, la patronal publicó en nota interna el protocolo. Lo detalló punto a punto, tal como le pidió la policía autonómica", explican fuentes cercanas.
Fecasarm ha confirmado el extremo y ha subrayado que el cuerpo pidió expresamente que se informara a los asociados.
Sexuales, también
La patronal dio una doble noticia. Por un lado, dio a conocer a sus asociados los datos de las actas A47, a usar en los espectáculos públicos y las actividades recreativas, además de los negocios extraordinarios, una novedad con respecto al anterior procedimiento.
Por el otro, informó de las nuevas prácticas para regular el proceder de los inspectores con los locales con espectáculos en directo de naturaleza sexual.
Nueve campos
Según ha podido saber Crónica Global de fuentes cercanas al encuentro del 7 de febrero, la nueva acta consistirá en nueve apartados que determinarán el grado de cumplimiento de legalidad de la discoteca.
Entre otros aspectos, los agentes verificarán la rotulación, titulación de los vigilantes, la higiene y salubridad, el derecho de admisión o las medidas de seguridad.
Más ágil
Además, los Mossos pedirán el correo electrónico de la persona física o jurídica que dirige el establecimiento para agilizar las comunicaciones, una de las grandes demandas del sector, que ve cómo languidecen las inversiones si se demora la tramitación de la licencia, se suspende temporalmente el permiso o se precinta el local.
El acta A47 ya está disponible para los Mossos d'Esquadra que se ocupan de las inspecciones, a la espera de la aprobación de la nueva Ley de Ordenación de las Actividades Públicas y Recreativas, actualmente en tramitación.