Del negocio cárnico al inmobiliario. La familia Vall Palou, propietaria del holding agroalimentario Vall Companys, cuenta en paralelo con una empresa inmobiliaria: Renden S.L. Siempre lejos de los focos mediáticos, esta otra sociedad ha recibido una inyección de capital considerable, de casi 2 millones de euros.
En concreto, la ampliación de capital es de 1.999.977,75 euros, según se ha publicado este jueves en el BORME. La sociedad, creada en julio de 2001, apenas registra actividad, por lo que la ampliación repentina de capital llama la atención.
La administradora única de Renden, Meritxell Vall Esquerda, es la actual consejera Vall Companys. Además, controla el 33% del holding, a partes iguales con sus hermanos Josep y Óscar. El relevo generacional se produjo en diciembre de 2015 al fallecer el padre, Josep Vall Palou, que estuvo a la cabeza del imperio cárnico y fue el artífice de las reorganizaciones del holding de las últimas décadas.
El lucrativo negocio cárnico
El negocio inmobiliario es, por ahora, secundario. La compañía Renden se ha negado a hacer declaraciones a Crónica Global, alegando que la política de comunicación externa de la empresa pasa por no hablar con los medios, según ha señalado. La prioridad es la cárnica, así como la discreción. Aún así, la familia saltó a primera línea cuando anunció el traslado de su sede de Barcelona a Madrid, por la incertidumbre política catalana.
El holding familiar, que se agrupa bajo Inversions Fenec, aglutina tres filiales, Vall Companys, Harinera La Meta –germen del grupo– y Transegre. Éstas, a su vez, poseen cerca de 30 subsidiarias, que son titulares de otras tantas instalaciones industriales por toda España.
El grupo incrementó el pasado año en un 4% la cifra de negocio, hasta superar los 1.400 millones en 2015, último ejercicio publicado por la compañía en el registro mercantil, a la espera de que cumpla con su objetivo de subir las cuentas de 2016.
La cárnica cuenta con 1.900 granjas asociadas. La producción más destacada es la de carne de porcino, con 340.000 toneladas, y la avícola, con 115.000 toneladas. También genera 13.000 toneladas, tanto de carne de vacuno como de jamón curado, además de producir pienso y harina.