La familia Carulla, dueña de Agrolimen, intenta hacer caja con el Consorcio de Jabugo. El prestigioso operador del negocio de los ibéricos ha despertado el interés de una compañía que ya es fuerte en el sector, la firma familiar Grupo Osborne. La operación está madrura, pero aún no se ha cerrado, tal y como han reconocido los implicados.
Ha provocado el nerviosismo de los trabajadores del consorcio, una empresa con sede en Sevilla, y del Matadero de Cumbres Mayores, con instalaciones en la localidad de la sierra onubense que da nombre a la firma y con oficinas en la capital andaluza. La plantilla pide que la venta incluya garantías laborales.
Osborne se extiende
Para Osborne, implicaría expandir las marcas Cinco Jotas y Sánchez Romero Carvajal. Se trata de la segunda línea de negocio del grupo. Sus principales activos se incluyen en las bodegas familiares, lideradas ahora por la octava generación. Tomás Osborne ocupa la presidencia.
Los Carulla obtendrán una nueva entrada de caja para Agrolimen. La productora de pastas Gallo se encuentra en horas bajas y ha iniciado una estrategia para soltar lastre en los negocios que no son core. Entre ellos, la venta de su negocio de restauración Eat Out Group (Pans & Company, FresCo o Ribs, entre otros) al grupo portugués Ibersol en agosto.
Se hizo con el control del Consorcio de Jabugo en diciembre de 2011 en una polémica operación que vehiculó a través de la filial Inveramen. Hasta hace un año no era dueña del 100% del capital. Caixabank había heredado de Cajasol, una de las entidades de Banca Cívica, un 17,76% del grupo andaluz especializado en elaborar jamones, carnes y embutidos para Agrolimen. No se hizo pública la cifra de la operación.