Foment del Treball deberá decidir antes del 31 de enero si expulsa o no a Cecot. Así se decidió hace, aproximadamente un mes, aunque los directivos de ambas organizaciones aún no se han sentado para empezar a debatir si existen motivos para el divorcio o no. La primera reunión para este fin tendrá lugar de forma previsible la próxima semana.
El presidente de la gran patronal catalana, Joaquim Gay de Montellà, lo explicó en estos términos en el encuentro mensual de la junta directiva de la institución celebrado este lunes. En las últimas semanas se ha intentado dar forma al grupo de trabajo en el que se mantendrá el debate.
Grupo de trabajo
Estará compuesto por tres miembros de Foment del Treball y otros tres de Cecot. Por parte de la gran patronal catalana se sentarán el vicepresidente y responsable del grupo de trabajo de compliance, Joan Castells; el secretario general, Joan Pujol, y un vocal. Los representantes de la organización empresarial de Terrassa (Barcelona) aún están pendientes de confirmación oficial.
El presidente de Cecot, Antoni Abad, ha sido el que tomado las decisiones que han distanciado a ambas organizaciones de forma personal y se ha defendido del mismo modo. Ha amenazado con presentarse a la presidencia de Foment del Treball y también ha tenido palabras conciliadoras. Con todo, como Gay de Montellà no estará presente en esta mesa de diálogo se espera que los egarenses estén representados por su mano derecha, David Garrofé.
Falta de consenso en Foment del Treball
La decisión sobre escindir Cecot de la gran patronal se deberá ratificar en la junta directiva y la reunión del pleno de Foment del Treball de las primeras semanas de febrero. Por ello, el grupo de trabajo deberá concluir antes si la territorial de Terrassa ha cumplido con los estatutos y los códigos de conducta de su organización madre con sus actividades recientes. Es decir, si ha sobrepasado o no su ámbito de referencia.
Fuentes de la gran patronal aseguran que el debate debe ser sosegado y que la resolución final debe ser consensuada y clara, ya que marcará un precedente en las relaciones empresariales en Cataluña. Por ahora, ninguna de las dos opciones que están sobre la mesa cuenta con el respaldo de la mayoría de los integrantes de Foment del Treball.
La búsqueda de esta voz unitaria para expulsar o mantener a Cecot en la gran patronal catalana es prioritaria, por lo que nadie descarta que incluso se dé más tiempo al grupo de trabajo.