Todo sigue igual. Carles Vilarrubí sigue sin aportar luz a sus negocios con el hijo mayor de Jordi Pujol. Este lunes, en la última comparecencia ante el juez José de la Mata, en la Audiencia Nacional, el empresario nada importante ha aclarado en relación a la cuenta que abrió en Credit Andorra en 1986 y que Anticorrupción vincula con comisiones al descendiente del expresident.
Vilarrubí, vicepresidente del Barça, consejero de Fira de Barcelona, accionista de RAC1, vicepresidente en España de Banca Rothschild y responsable de la aseguradora Willis, siempre ha negado relación comercial alguna con Pujol Jr, pero nuevos datos procedentes de Andorra cuestionan la veracidad de su testimonio.
Silencio
En esta nueva documentación se constata que Vilarrubí es titular de la cuenta, algo que el directivo no ha negado. No obstante, no ha dado ninguna respuesta precisa a las cuestiones que se le han planteado, e incluso a dicho no saber en qué entidad abrió dicha cuenta, que fue cerrada en 2000.
Fuentes presentes en la declaración han añadido Vilarrubí tampoco ha dado ninguna información sobre las cantidades que se movieron en el citado depósito. Ha insistido en que ya había respondido sobre estas misma cuestión durante sus comparecencias anteriores ante el juez.
Supuestos delitos fiscales
En su primera declaración en la Audiencia Nacional, celebrada el 16 de noviembre de 2015, el empresario aseguró desconocer los traspasos por valor de 50 millones de pesetas --cerca de 300.000 euros al cambio actual-- que Jordi Pujol Ferrusola realizó a la empresa Restaurantes de Cerdaa y apuntó que el poder de decisión estaba en manos del chef José María Bosch.
En esta pieza se investigan supuestos delitos fiscales, contra la Hacienda Pública y de blanqueo de capitales que comenzaron con la investigación al primogénito de los Pujol y se amplió posteriormente a otros miembros de la familia y empresarios.
El negocio de hostelería
Vilarrubí ya explicó en su día que decidió entrar en el negocio de hostelería para ayudar económicamente al chef y que, en todo caso, fue propietario solo a efectos nominales puesto que las decisiones las adoptaba el cocinero. Él puso tres millones de pesetas y junto con otras personas constituyeron el consejo de administración en 1993, si bien el consejero delegado seguía siendo Bosch.
En 1998, se disolvió este órgano, al que sus miembros se referían como el "consejo asesor" puesto que ellos se limitaban a dar ideas pero sin tener conocimiento del día a día del negocio ni acceder a sus cuentas. En 2010, el chef pidió recomprarles su parte del negocio, él recuperó los 18.000 euros invertidos y en ningún momento recibió un reparto de beneficios.
El primer traspaso desde Andorra
Según dijo, el primer traspaso, por importe de 50 millones de pesetas, que Jordi Pujol Ferrusola hizo desde Andorra se realizó en 1995 y otras transacciones se efectuaron cuando el Consejo de Administración estaba disuelto.
El Juzgado Central de Instrucción número 5 rastrea las actividades económicas de Jordi Pujol Ferrusola desde que el 17 de enero de 2013 su exnovia María Victoria Álvarez declarara ante el juez Pablo Ruz que acompañó a Andorra al hijo mayor del expresident para ingresar en un banco una mochila llena de billetes de 500 euros.