El Juzgado Mercantil número 1 de Girona ha declarado el concurso de acreedores de la compañía Marina Calonge Sant Antoni, con sede en el municipio gerundense del que toma el nombre.

El año pasado, la empresa enajenó todos sus activos, por los que ingresó nueve millones de euros. Aplicó el producto obtenido a liquidar parte de los pasivos, cifrados en 17 millones, y los bancos se avinieron a condonar el resto. Gracias a tales ingresos, Marina Calonge Sant Antoni declaró el pasado año un beneficio neto de 8,3 millones.

Pero a la hora de hacer frente al impuesto de sociedades, las arcas de la empresa están exhaustas, por haber amortizado los créditos recibidos.

En consecuencia, no le ha quedado otro remedio que llevar los estados contables al juzgado y solicitar la suspensión de pagos. El expediente derivará previsiblemente en la liquidación de la sociedad.