La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha multado con 4,1 millones de euros a Bankinter por colocar productos bancarios a clientes sin haber evaluado sus conocimientos en la materia.
El regulador considera una infracción "muy grave" que la entidad financiera evitara realizar test de conveniencia o los hiciera de forma deficiente antes de vender permutas financieras sobre tipos de interés, unos productos complejos. La mala praxis tuvo lugar, ha agregado la CNMV, entre el 1 de enero de 2008 y el 31 de enero de 2009.
Además de la sanción anterior, el organismo ha multado a Bankinter con 100.000 euros por incumplir sus obligaciones en la supervisión de la compra de otros instrumentos financieros complejos, como los bonos estructurados, por parte de sus clientes.
La resolución del expediente sancionador es firme en vía administrativa, pero puede ser recurrida mediante recurso contencioso-administrativo en la Audiencia Nacional.