Renfe obtuvo un beneficio neto de 14,85 millones de euros en los ocho primeros meses del año, con lo que superó los números rojos que venía contabilizando durante este ejercicio y los registrados en el mismo periodo de 2015, según informó la empresa.
La compañía ferroviaria vuelve a las ganancias impulsada por el servicio de AVE y Larga Distancia, tras los récords de viajeros que estos trenes se anotaron durante la pasada campaña de verano.
2015, hito histórico
De esta forma, Renfe se asegura el objetivo de cerrar en beneficios el ejercicio 2016 y encadenar así su segundo año consecutivo en positivo, tras lograr en 2015 la primera ganancia de su historia.
En cuanto a los ocho primeros meses de este año, la operadora elevó un 5,2% sus ingresos totales, hasta sumar 2.109 millones, mientras que logró reducir un 1% sus gastos de explotación, hasta 1.807 millones, en línea con la estrategia de reducción de costes de la empresa.
De esta forma, a la conclusión del mes de agosto Renfe presentaba un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de 301,9 millones.
En términos operativos, entre enero y agosto, la compañía que preside Pablo Vázquez transportó 306,7 millones de viajeros en todos sus distintos tipos de trenes (Cercanías, Media Distantia, AVE y Larga Distancia), un 1,1% más que un año antes.
Las mercancías
El negocio del tráfico de mercancías, el gran atraso de España respecto al resto de los países europeos, se desplomó no obstante un 14,3%, dado que los trenes de la empresa movieron unos 12 millones de toneladas.
La cuenta de resultados de Renfe de los ocho primeros meses viene así impulsada por el negocio de AVE y Larga Distancia, gracias al continuo crecimiento que vienen registrando desde que la empresa lanzó en 2013 su nueva política comercial, con la bajada del precio del billete y la introducción de descuentos, y los fuertes aumentos que registra en los meses de verano.
Este servicio se anotó el pasado mes de julio un máximo histórico mensual de viajeros, al superar la cota de los tres millones de usuarios. En concreto, los trenes AVE y Larga Distancia de Renfe transportaron en ese mes 3,034 millones de pasajeros, de los que 1,83 millones lo hicieron en AVE, un 6,7% más que un año antes.
Además, el AVE a Barcelona logró al cierre del pasado mes de agosto un récord histórico en cuanto a cuota de mercado frente al avión, al copar el 65,6% de los viajeros que se desplazaron entre las dos capitales.
La Alta Velocidad sigue así reforzando el liderazgo en los traslados entre Madrid y la Ciudad Condal que registra casi desde su puesta en servicio, en febrero de 2008, y que solo cedió durante unos meses del 2012, en plena crisis.