Vails Resorts, el gigante estadounidense del turismo de nieve, compra la mayor estación de Canadá, Whistler Blackcomb. La operación se ha cerrado en 1.390 millones de dólares (1.254 millones de euros al cambio actual), a 36 dólares por acción, un 43% más sobre el cierre del parqué el viernes.

El acuerdo aporta músculo financiero a Whistler e impulsará la parcela de mercadotecnia, según el director general, Dave Brownlie. Él seguirá al frente de la estación canadiense como jefe de operaciones y se incorporará al consejo de Vail.

Más días vendidos

Whistler ve en esta venta una clara forma de expansión. Vail domina el mercado estadounidense y, hace un año, compró la estación Perisher Blue, la más grande de Australia, en un claro movimiento de internacionalización.

En los últimos meses, Whistler, inaugurada con motivo de los Juegos de invierno de 1968, incluso superó a Vail como la estación con más días vendidos en América del Norte, gracias al incremento de las nevadas y a la debilidad del dólar canadiense. Entre sus planes de futuro pasaba el aumento de su terreno un 25% con el objetivo de ser el complejo con más días vendidos del mundo.