Los títulos de Abengoa han cerrado la jornada bursátil con una subida del 17% ante la inminencia de un acuerdo definitivo entre sus acreedores para cerrar el plan de reestructuración de la compañía.
Tras las reuniones mantenidas en los últimos días entre los bancos acreedores y los bonistas se ha avanzado en el acuerdo, del que "quedan unos flecos pendientes y, de no torcerse las posiciones", podría cerrarse en cualquier momento.
Los bancos acreedores de Abengoa y los bonistas confían en llegar antes de que acabe el mes a un acuerdo definitivo para cerrar el plan de reestructuración de la compañía, pese a reconocer que las negociaciones con la empresa van más lentas de lo esperado.
Menos necesidades
El pasado 30 de junio, Abengoa y sus acreedores firmaron un principio de acuerdo que establece sus nuevas necesidades de liquidez en unos 1.200 millones de euros, frente a los 1.500-1.800 millones iniciales. Así lo anunció en la junta general de accionistas el presidente de la compañía, Antonio Fornieles.
La inyección de dinero nuevo es de casi 500 millones, a los que hay que sumar 515 millones de los créditos ya inyectados, que habrá que refinanciar o quitar, y las comisiones e intereses correspondientes. Faltaba por cerrar quiénes pondrán los avales, que son aproximadamente otros 250 millones.
El comité de bancos está compuesto por Bankia, Banco Popular, Banco Santander, Caixabank y Credit Agricole, mientras que el grupo de inversores de nuevo dinero está actualmente integrado por Abrams Capital, The Baupost Group, Canyon Partners, The D.E. Shaw Group, Elliott Management, Oaktree y Värde.
Ambos grupos, que han procedido a un due diligence financiero durante los últimos meses, han trabajado con Abengoa con el objetivo de aportar una línea de financiación de nuevo dinero y nuevos avales, que serán ofrecidos a los acreedores actuales.
Plazo incumplido
A pesar de que la intención era que antes de que hubiera expirado el mes de julio se hubiera podido atar el acuerdo para que el juez tuviera en sus manos la homologación de este acuerdo con al menos el 75% de las adhesiones necesarios, finalmente no fue posible.
Con este acuerdo, Abengoa esquivaría de manera definitiva la amenaza del concurso de acreedores, después de que el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Sevilla concediera en abril una prórroga de siete meses, hasta el próximo 28 de octubre, para su cierre definitivo.
Asimismo, el grupo de ingeniería y energías renovables ha visto cómo en las últimas fechas, ante los retrasos en el acuerdo, se agudizaban sus tensiones de liquidez, lo que le llevó a adoptar una demora de carácter excepcional en el abono de la paga extra de verano.