Ikea, Conforama y Leroy Merlin tienen problemas desde este lunes en la localidad de Sabadell (Barcelona). Los tres gigantes del comercio han sido multados por el gobierno local por eludir el pago del Impuesto de Actividades Económicas (IAE).
El concejal de Nueva Economía y Servicios Centrales del consistorio, Albert Boada (Entesa per Sabadell – CUP), afirmó que las tres empresas tributaban “como si fueran un pequeño comercio y no dentro de una actividad de gran superficie”. Así, la multinacional sueca habría dejado de aportar a las arcas públicas 1,02 millones de euros, su homólogo francés unos 347.000 euros y el grupo galo dedicado al bricolaje 87.300.
Polígono industrial quebrado
Boada añadió que los tres grupos tampoco han declarado los metros cuadrados que ocupan en el polígono industrial de Sant Pau de Riu-sec. Son los únicos negocios que se han instalado en la zona, cuyo desarrollo chocó con la crisis y provocó la quiebra de la promotora, Vantoureix. Superó el concurso de acreedores en septiembre de 2013 gracias al papel del BBVA, que asumió la deuda contraída en su día por Caixa Sabadell.
De hecho, la reclamación del equipo municipal se remonta a antes de este episodio. El edil reconoció que se ha reclamado la liquidación de impuestos desde 2012 hasta la fecha porque se trata del “período administrativo legal que se puede girar”.
Liquidación de intereses
El expediente sancionador a Ikea, Conforama y Leroy Merlín se inició en junio de 2014 y los trámites se prolongaron a lo largo de 2015. Se cerró en abril de 2016 para empezar el “proceso de liquidaciones” que ya ha concluido, según el edil.
El problema es que queda pendiente liquidar los intereses de demora: 63.200 euros en el caso de Ikea, 24.700 por parte de Conforama y 6.300 Leroy Merlin.
Acciones legales
El consistorio desde mayo de 2015, una confluencia de ERC, Canvi a Sabadell (Podemos, ICV y un grupo local) y Crida per Sabadell (Entesa per Sabadell – CUP), no descartan que los afectados presenten un contencioso administrativo para discutir la “interpretación que hace la Agencia Tributaria Municipal”.
La sanción a las grandes superficies en la localidad cuenta con un precedente, según Boada, el que recibió el centro comercial Alcampo en la vecina localidad de Sant Quirze del Vallès. Los tribunales dieron la razón al ayuntamiento.