Jornada negra de Vueling en el Aeropuerto de Barcelona. La compañía ha cancelado media docena de vuelos y se han producido numerosos retrasos y largas colas en los embarques, unos problemas que se están multiplicando en los últimos días.
Las protestas de los pasajeros han generado escenas de tensión en los mostradores de la aerolínea. Unos ususarios que también se quejan de falta de atención a la hora de atender las reclamaciones.
Algunos pasajeros afectados aseguran que los retrasos han alcanzado hasta 12 horas sin que Vueling haya ofrecido ninguna explicación. En algunos casos se quejan de haber tenido que pasar la noche en el aeropuerto sin que les hayan ofrecido un lugar donde dormir. "Nos han dejado tirados como colillas", señala uno de esos usuarios. "Nunca había recibido un trato como este", se queja otro.
Falta de personal para atender la demanda
Desde la aerolínea se defienden asegurando que las incidencias de la última semana --que la compañía ha evitado cuantificar-- han sido "circunstancias puntuales debidas a dificultades operacionales, algunas de las cuales han estado totalmente fuera de control de Vueling", en referencia a las huelgas de pilotos y controladores en Francia e Italia.
Sin embargo, expertos del sector apuntan que los problemas de Vueling se deben al exceso de oferta y a la falta de personal para hacerla frente, especialmente durante el verano, una circunstancia que fue denunciada hace dos meses por la responsable de programación de Vueling, que posteriormente fue despedida.