Entrada en la sede central de Industrias Titán, situada en el polígono industrial de El Prat del Llobregat (Barcelona).

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Business

Los herederos de Industrias Titán ponen un pie en la aviación

Joaquín y Alberto Folch-Rusiñol constituyen una sociedad para intermediar en el sector aéreo que aún no tiene actividad

30 mayo, 2016 23:53

Los herederos de Industrias Titán, Joaquín y Alberto Folch-Rusiñol Faixat, han puesto un pie en el sector aéreo. Los dos hermanos, que se repartirán la propiedad del grupo de pinturas y lacas, crearon en marzo la sociedad Fugl Business Air cuyo principal objeto social será la intermediación en el sector, aunque no descartan ejecutar alguna inversión en adquirir aeronaves, además de añadir las que son propiedad de la familia.

Todo ello son planes de futuro, indican fuentes próximas a la familia. El capital inicial de la firma es de 3.000 euros, el rango habitual en este tipo de operaciones, y la actividad por ahora es nula.

Diversificación de negocios

Su constitución se enmarca en la estrategia empresarial que han iniciado los dos hermanos y que se basa en diversificar los negocios que se gestionan desde la holding familiar, Fabricas Folch SL, añaden los mismos interlocutores. Ambos tienen poderes en la sociedad de inversión que aún está controlada directamente por sus pares, Joaquín Folch-Rusiñol Corachán y Virginia Faixat.

Industrias Titán es la principal participada de la sociedad, capitalizada con 23,1 millones según datos del Registro Mercantil. También se controlan otros negocios que desde hace tiempo acompañan a la familia, como los de automoción (el presidente del grupo convirtió su pasión por las dos ruedas en actividad profesional) o la empresa que controla el patrimonio inmobiliario de las fábricas y centros de trabajo de la familia.

Negocios paralelos

Joaquín y Alberto Folch-Rosiñol tienen una vocación más empresarial que la de su padre, añaden otros interlocutores de su entorno. Por ello, además de involucrarse de una forma más personal en la gestión del grupo de pinturas también han emprendido negocios paralelos para probar y entrenar sus capacidades directivas.