El Instituto Laboral de la Comunidad de Madrid intentará buscar este lunes un acuerdo al conflicto laboral que existe entre los trabajadores y la dirección de Assignia Infraestructuras, la constructora del Grupo Essentium, el conglomerado de empresas del sector que opera en todo el mundo de la responsable económica del Barça, Susana Monje
La plantilla ha pedido la intervención del tribunal de mediación ante lo que consideran que es una situación que se ha enquistado: el retraso de dos meses en el pago de las nóminas de la compañía. El comité de empresa solicitó que se abriera una negociación formal para arrancar a la cúpula de Assignia, dirigida por Fernando Arboledas, un compromiso de que se revertiría la situación lo antes posibles.
Huelga convocada
También reclamó información sobre el plan de negocio de la compañía, para garantizar que la actividad futura de la compañía en España no contempla nuevas oleadas de despidos. Pero la dirección no ha atendido a las demandas de los trabajadores y, por ello, el comité de empresa dio un paso más.
De forma paralela a la petición de una mediación pública, los sindicalistas han puesto sobre la mesa una convocatoria de huelga. Los detalles se concretarán a lo largo de los próximos días y dependerán en gran medida de la postura que defiendan los directivos de Assignia ante el Instituto Laboral de Madrid.
Diálogo abierto con los sindicatos
Fuentes cercanas a la cúpula de la empresa aseguran que asistirán a la mediación y afirman que su intención es mantener la línea de diálogo abierta con los sindicatos “como lo acordamos con anterioridad”. Asimismo, indican que la nómina de marzo se pagará en los próximos días a medida de que se superen las tensiones de tesorería que arrastra el grupo desde hace meses.
Assignia es otro de los grupos afectados por la caída de la obra pública y la construcción en España. Mantiene una alta actividad internacional, pero la crisis y la necesidad de contención del gasto público ha lastrado el negocio nacional y ha forzado medidas como los retrasos en los pagos de las nóminas. A la falta de liquidez en el país se le une el esfuerzo inversor que mantienen en el mercado internacional para garantizar la viabilidad de la compañía, que consolida la situación hasta que no se empiecen a cobrar los proyectos en marcha.
Ejercicio de transparencia
Con todo, los mismos interlocutores manifiestan que la plantilla es consciente en todo momento de los problemas puntuales de la compañía y los pasos que se van dando para solucionarlos en un “ejercicio de transparencia”. Algo que los representantes de los trabajadores ponen en duda. Por ello, han solicitado la mediación del organismo público.
Esperan obtener allí las garantías para continuar con su trabajo que no han conseguido en los encuentros internos del comité de empresa con la dirección de Assignia.