Volkswagen ha tardado más de un mes a presentar el cierre del ejercicio 2015 y desde este viernes ya hay una cifra que motive el retraso: 1.582 millones de euros. Estas son las pérdidas que el consorcio automovilístico dirigido por Matthias Muller ha reconocido tras varios ajustes contables. Los números rojos netos los superan de lejos: alcanzan los 5.515 millones, cifra que contrasta con los beneficios de 2.476 millones obtenidos en 2014.
Se trata de la factura del primer envite del caso diéselgate, el escándalo de la manipulación de varios motores diésel con un software diseñado exclusivamente para rebajar las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx).
16.200 millones de provisión
Muller reconoce en un comunicado que el resultado de Volkswagen se ha visto afectado negativamente por unos extraordinarios de 16.900 millones. La inmensa mayoría (de hecho, 16.200 millones) corresponden a las provisiones para hacer frente a las posibles multas por haber manipulado las emisiones.
En cuanto al resto de magnitudes económicas del ejercicio, Volkswagen mantenía la expansión antes de que las autoridades de EEUU descubrieran el software.
Más facturación y menos ventas
La facturación avanzó el 5,4% hasta los 213.292 millones, lo que implica que los compradores optan por modelos con mayores prestaciones que son más caros. La cifra de unidades vendidas cayó el 2% hasta los 9,93 millones de vehículos, casi la misma rebaja de la producción: bajó el 1,9% hasta los 10,01 millones de unidades fabricadas en todas las plantas del mundo.
La plantilla creció el 3% hasta las 610.076 trabajadores.
Resultado operativo positivo
Antes de los extraordinarios, el resultado operativo del consorcio alemán se situó en 12.800 millones de beneficios, el 0,8% más que el ejercicio anterior, cifra que demuestra la “buena forma” de la compañía según Muller. El hachazo del diéselgate los rebaja hasta los -4.069 millones.
El presidente del consorcio lamentó el “gran impacto en la posición financiera de Volkswagen” que tiene la “actual crisis”. “Ahora tenemos la firma intención y las mentes puestas en manejar la difícil situación y para eso estamos usando nuestros propios recursos”, añadió.
Han reforzado la liquidez de la división de automoción, a la que impacta directamente el escándalo de la manipulación, gracias a la venta de las acciones que tenía de Suzuki. Generaron 2.800 millones de flujo de caja, por lo que se reforzó la posición de los 17.600 a los 24.500 millones.
Previsión para 2016
En cuanto a la previsión del próximo ejercicio, Muller mantuvo que recuperar los resultados positivos gracias al plan de eficiencia. Espera que la cifra de negocio caiga como mucho el 5%, mientras que las matriculaciones se mantengan en el mismo nivel.
Volkswagen presentará oficialmente sus resultados el próximo jueves, día 28, en la sede central del grupo, en Wolfsburg (Alemania).