La celebración del Día Mundial del Agua ha tenido a un convidado de piedra este viernes en Barcelona. La reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) sobre la creación de la empresa mixta que gestiona el agua en el Área Metropolitana (AMB) ha sido carnaza de corrillos a la entrada y salida de la celebración; ha estado presente en el discurso del presidente ejecutivo de Agbar, Ángel Simón, y ha sido el elemento central del encuentro con la prensa que ha asistido al acto.
“Lo primero que se debe tener claro es que no ha habido una anulación de la concesión”, ha manifestado el ejecutivo. El tribunal anuló el procedimiento mediante el cual se creó la empresa mixta --participada en un 70% por Agbar, un 15% por Criteria (La Caixa) y otro 15% de titularidad pública-- pero “no discute la propiedad de los títulos de la Sociedad General de Aguas de Barcelona, la que presta el servicio desde 1867 en la ciudad”.
Activos de agua y depuración
Simón ha recordado que al crear la sociedad mixta, la gestora privada aportó sus activos de agua en Barcelona y el AMB los servicios de depuración, por lo que el servicio que presta en la capital catalana y la mayoría de municipios de su ámbito de influencia se mantiene inalterable.
Agbar y la sociedad mixta que gestiona el agua en el territorio --Aigües de Barcelona, Empresa Metropolitana de Gestió del Cicle Integral de l’Aigua-- anunciaron que presentarán recurso de casación ante el Tribunal Supremo, por lo que la sentencia no es firme.
BComú y ERC no recurrirán
En contraposición, la vicepresidenta de la AMB, Janet Sanz (BComú), manifestó este jueves que sus representantes no harán lo propio al considerar que la resolución es un “punto de inflexión” para buscar un modelo de gestión pública del agua. ERC se sumó a la propuesta de BComú, aunque no llegará a buen puerto sin el apoyo de algún otro partido con representación en la Administración supramunicipal.
Todas las miradas están puestas ahora en el PSC. La decisión que tomen los socialistas será clave para que prospere la iniciativa de BComú, pero aún no se han pronunciado.
Decisión del PSC
Participaron en la creación de la empresa mixta en 2013, cuando Xavier Trias (CDC) era presidente del AMB, aunque apostar ahora por presentar un recurso de casación distanciaría al PSC del partido de Ada Colau en un momento en el que Jaume Collboni estudia un pacto para facilitar la gobernabilidad de Barcelona.
Por el momento, el alcalde socialista de Cornellà del Llobregat, Antonio Balmón, no ha participado en el acto que tradicionalmente tiene lugar en su municipio y del que siempre hace gala. Simón ha afirmado que “no cree” que la resolución del TSJC y la indefinición del PSC sea el motivo de su ausencia.
Indemnización millonaria
El equilibrio de fuerzas es delicado y de dudosa eficacia final, ya que recuperar la titularidad pública del servicio significa indemnizar de entrada a Agbar por la pérdida de la concesión --así lo reconoce incluso el TSJC en el voto particular del presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, Alberto Andrés-- y disponer de la infraestructura necesaria para prestar el servicio.
Simón ha declinado estimar la cifra a la que podría llegar la expropiación de los títulos y la compensación por los beneficios futuros esperados. Eso sí, ha declarado que Berlín hizo lo propio “de acuerdo con la ley y le costó 2.000 millones de euros” y que Buenos Aires también recuperó la titularidad pública del servicio al margen de las normas vigentes y la factura ha sido mayor: “15 años de litigio, quedar al margen de los organismos internacionales y una sentencia que en estos momentos alcanza ya los 1.500 millones de dólares”.
Alto nivel de calidad del servicio
Ante la sala, Simón ha hablado del alto nivel de calidad del servicio que Agbar presta en Barcelona.
“Tenemos una continuidad del 99,9%, un rendimiento del 83% en 5.000 kilómetros de red y la pérdida real de agua por motivos técnicos es de un 7%”, datos que rozan la excelencia y se dan en muy pocas ciudades de España, Europa y del mundo. Esa situación propicia, entre otras cosas, que los habitantes del AMB solo usen 100 litros por día por la gran sensación se seguridad que tienen del recurso.
‘Caso ATLL’
La guerra del agua, el conflicto que Agbar mantiene desde 2012 con la Generalitat y Acciona por la gestión de ATLL, también ha estado presente en el discurso del presidente del grupo. Ha exigido más compromiso tanto del Govern como de la compañía de los Entrecanales a la hora de asumir el coste de las facturas del agua de las personas en riesgo de exclusión social.
Simón ha detallado que el fondo de solidaridad de Agbar ayuda a más de 13.000 familias del AMB que están exentas de pagar la factura del agua. El problema es que solo el 50% del recibo corresponde al servicio del agua y, de ello, una parte es el canon que se paga por la gestión del agua que realiza ATLL, la empresa que se encarga del servicio hasta los depósitos de cabecera del municipio. Todos estos coses también los asume como propios Aguas de Barcelona.