El nuevo consejero de Empresa i Coneixement catalán, Jordi Baiget, se comprometió en su primera comparecencia ante la comisión parlamentaria de su ámbito de referencia este viernes en abordar las grandes cuestiones que Felip Puig y Francesc Xavier Mena, sus dos predecesores en el cargo en las legislaturas de Artur Mas, dejaron sobre la mesa por la polémica que provocaron. Todo ello, en 18 meses.
Pasar página al ‘caso ITV’
La primera cuestión es la más compleja de todas: terminar la renovación de la ley que ordena la apertura de nuevas estaciones de ITV en Cataluña. Mena intentó modificar el trabajo realizado en el último gobierno tripartito y terminó con una causa judicial abierta, el caso ITV, por la injerencia del hijo pequeño de Jordi Pujol y uno de los máximos directivos de CDC en ese momento, Oriol Pujol Ferrusola. De hecho, la apertura de la investigación propició que abandonase todos sus cargos en el partido.
El fiscal dio por cerrada la instrucción del caso el pasado noviembre y ahora está a la espera de que la magistrada instructora lo envíe a juicio. Baiget defendió que el único objetivo de su departamento en la nueva etapa será adaptar la norma vigente a las “directivas europeas, las sentencias judiciales y a la necesaria apertura a la competencia de estas empresas”. Espera dar de este modo carpetazo al escándalo de las mordidas que presuntamente se cobraron al diseñar una nueva ordenación de estaciones ITV.
Cámara de Comercio catalana
La futura ley de cámaras de comercio en Cataluña será pasto de la justicia si finalmente las competencias que se atribuyen a las organizadoras de dinamización empresarial chocan con las de la Cámara de España. Puig trabajó en esa dirección y desde su entorno se apuntó que la norma que regiría las instituciones sería una estructura de estado más, aunque no culminó el desarrollo.
Baiget no ha hecho ninguna referencia al espíritu de la futura norma. Se ha limitado a indicar que abordará aspectos como la financiación, las atribuciones de funciones, su relación con la Generalitat, los sistemas de elección de sus directivos, entre otras cuestiones. Sin más detalles. Sólo mantiene que se creará la Cámara de Catalunya.
Ley de comercio
El consejero tampoco temerá a abrir la caja de Pandora de la ley general de comercio de Cataluña. Mantuvo en la comisión que se requiere un nuevo ordenamiento jurídico que proteja el modelo catalán que proteja el empleo y garantice la vida comercial en los centros urbanos que está "amenazado por el continuo vaciamiento de competencias por parte del Estado".