Los tentáculos de Florentino Pérez abarcan todos los ámbitos imaginables. Sus empresas no desdeñan ninguna oportunidad de negocio en cualquier sector que se precie, sobre todo si hay dinero público de por medio.
Uno de los intereses menos conocidos del presidente del Grupo ACS y del Real Madrid es el de las artes escénicas. A través de la empresa Clece, S.A. --integrada en ACS--, Florentino Pérez gestiona y explota desde hace siete años dos de los espacios públicos más relevantes en el mundo del espectáculo de la Comunidad de Madrid: los Teatros del Canal y el Teatro Auditorio de San Lorenzo de El Escorial. Y lo hace por unas cantidades multimillonarias, poco frecuentes en el sector.
Más de 60 millones de euros
En 2009, el Gobierno de Esperanza Aguirre adjudicó a Clece la administración de ambos teatros por algo más de 8,5 millones de euros anuales más IVA. El contrato inicial era por dos años prorrogable a seis en caso de acuerdo por ambas partes, como finalmente sucedió.
En diciembre de 2014, con Ignacio González al frente del Ejecutivo autonómico, Clece volvió a ganar el concurso que se convocó una vez finalizada la adjudicación anterior. En esta ocasión, la empresa se quedó con la gestión de los dos espacios --ganándole la partida a una UTE formada por Eulen y Plural Multimedia Ocio-- por 6,3 millones de euros en 2015 y 6,8 millones en 2016 --IVA no incluido-- prorrogables por otros cuatro años.
Así, a finales de este año, la sociedad de Florentino Pérez habrá facturado a la Comunidad de Madrid más de 60 millones de euros por gestionar y explotar los dos teatros desde 2009.
En estas cifras no se incluye el sueldo de Albert Boadella, quien, a través de su sociedad Pataplás, S.L., se encarga desde 2009 de la dirección artística de los Teatros del Canal por encargo de la presidencia autonómica a razón de 90.000 euros anuales más IVA. Boadella supervisa la programación artística de Clece.
Recelos de la competencia
Esta adjudicaciones multimillonarias han generado los recelos de otros empresarios del sector, en algunos casos, más especializados en el mundo de las artes escénicas que Clece, cuyos negocios principales son el de la limpieza y el mantenimiento de todo tipo de instalaciones (como aeropuertos y centros escolares). Un hándicap que, como se puede comprobar, no supone problema alguno para Florentino Pérez.