Los accionistas mayoritarios de Banca Privada de Andorra (BPA), Higini y Ramon Cierco, reiteran su "firme compromiso con el Principado" e instan al Gobierno de Andorra a "encontrar una solución dialogada" a la crisis abierta por la intervención de la entidad bancaria por su presunta vinculación con blanqueo de capitales procedentes del crimen organizado internacional.
En un comunicado emitido este martes, la familia Cierco lamentan que "casi diez meses después" de que estallase el escándalo "solo la deficiente y opaca actuación de la administración es la generadora de la incertidumbre que eventualmente está poniendo en riesgo el conjunto del sistema financiero andorrano".
En todo caso, insisten en que "en ningún caso" van "contra Andorra", sino que "lo que legítimamente se cuestiona son las decisiones de sus gobernantes" y advierten de que no pueden renunciar a sus "derechos fundamentales", esto es, "el derecho a una defensa que desde el 10 de marzo con demasiada frecuencia ha sido vulnerada".
Acción "poco diligente" del Gobierno andorrano
Los accionistas mayoritarios insisten en que "la poco diligente acción" del Gobierno andorrano está perjudicando los intereses de los clientes y los empleados, e incluso al sistema financiero en su conjunto.
Además, recuerdan que las instituciones públicas andorranas "no advirtieron nunca al banco de eventuales problemas operacionales" y que se optó por la intervención de BPA "en base a un informa del INAF que nunca se ha hecho público".
Pendientes de conocer los cargos y la auditoría
La familia Cierco lamenta que "todavía hoy no se haya formalizado debidamente el pliego de cargos contra los miembros del consejo de administración de la entidad y sus más altos ejecutivos".
Finalmente, reclaman conocer "con luz y taquígrafos" el contenido de la auditoría elaborada por "una prestigiosa consultora americana que ha invertido de largo mas de 100.000 horas en analizar cuentas y clientes, y que facturará unos cuantos millones de euros a las arcas del Estado".