Abengoa ha presentado formalmente este jueves el preconcurso de acreedores. El grupo de energía solar ha solicitado al Juzgado de lo Mecantil 2 de Sevilla, al que ha recaído la causa, acogerse al artículo 5 bis de la Ley Concursal para ganar tiempo y poder negociar con la banca acreedora un nuevo acuerdo de financiación. El presidente de la compañía, José Domínguez Abascal, ha prometido que trabajaría “con la mayor energía” en la búsqueda de una “solución” a la difícil situación de la compañía ante la “inquietud” de la plantilla.
La empresa dispone de cuatro meses para conseguir o bien que la banca de su brazo a torcer y de el visto bueno final del pacto de reestructuración de la deuda que se persigue desde hace meses o la entrada de un nuevo socio que inyecte capital. “Durante este tiempo un equipo de personas muy cualificado trabajará con la mayor energía con el objetivo de poner en marcha una solución viable”, ha declarado el presidente.
Deuda corporativa
Ambos escenarios son complicados, pero si se declara finalmente el concurso la complejidad de la situación será extrema.
De entrada, los magistrados de Sevilla deberán lidiar con la mayor quiebra empresarial de la historia de España. La cúpula de Abengoa reconoce que la deuda bruta consolidad es de 8.903 millones de euros y que su coste medio alcanza el 7%. La inmensa mayoría es deuda corporativa: 5.828 millones al 7,6%. Sólo esta parte supera de lejos los 4.603 millones de agujero patrimonial con los que la inmobiliaria Martinsa Fadesa quebró.
Pasivo de 24.700 millones
La cifra final podría ir a más. El pasivo total del grupo a cierre del tercer trimestre superaba los 24.700 millones, según datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Esta abultada cifre hace inviable cualquier negocio de la compañía.
Por ello se hace necesario “alcanzar un acuerdo que permita hacer viable la empresa con la estructura de capital que sea necesaria”.
Organización de minoritarios
De forma paralela, y mientras el grupo se hunde otro 40% en su último día en el Ibex hasta los 0,25 euros por título (la capitalización baja de los 250 millones), la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec) moviliza a los inversores minoritarios de Abengoa para defender sus intereses de forma colegiada.
La organización pretende “velar y tutelar los derechos” de este grupo “ante la situación de incertidumbre y pérdida de valor”. Se enfoca a accionistas con inversiones entre los 20.000 y los 160.000 euros y promete analizar la situación financiera y jurídica de la empresa y las causas del actual proceso.
Aemec trabaja con el bufete Cremades y Calvo-Sotelo.