Patronales y sindicatos han llegado a un acuerdo para firmar el documento marco de las relaciones laborales en Cataluña que tendrá vigencia hasta diciembre de 2017. El nuevo Acuerdo Interprofesional de Cataluña (AIC) se firmará formalmente el próximo 27 de noviembre.
En los próximos días se debe ratificar formalmente por las cúpulas de Foment del Treball y su organización asociada de pymes, Fepime, y, por primer vez, Pimec por parte de los representantes empresariales y CCOO y UGT de Cataluña como portavoces de los trabajadores.
Comisión de seguimiento
El documento en cuestión aborda cuestiones como la flexibilidad laboral, los criterios de subcontratación y descentralización productiva, la responsabilidad social, la igualdad de género, el absentismo, la salud laboral o la ultraactividad, las condiciones en los que las condiciones establecidas por los convenios colectivos decaen por falta de acuerdo en la mesa de negociación.
Además, se constituye una comisión de seguimiento para fiscalizar anualmente el “objetivo común de tener cobertura completa” y que estará facultada para “adoptar las decisiones que correspondan de acuerdo con esto, con el uso de todas las posibilidades legales para aportar soluciones, entre ellas la negociación de acuerdos sectoriales o generales de cobertura”, según consta en el borrador pactado. Es decir, que asumirá las riendas de los debates cuando la mesa se levante sin llegar a un acuerdo.
Paz social
El AIC marca orientaciones, recomendaciones y criterios y desarrolla materias como la estructura de la negociación colectiva en Cataluña, el Tribunal Laboral que rige los debates que se enquistan y el Observatorio de la coyuntura económica de la negociación colectiva.
Foment y Fepime indican en un comunicado publicado este lunes que las partes consideran que la concertación social y la negociación colectiva “constituyen los mecanismos más idóneos para conseguir un sistema de relaciones laborales eficaz, flexible, equilibrado, permeable a las adaptaciones necesarias en los sectores y las empresas y que garantice la paz social”.
El gran objetivo del acuerdo marco es limitar al máximo posible los conflictos en centros de trabajo o sectores por falta de acuerdo en las mesas de negociación. El acuerdo anterior, firmado en 2011, se anuló en los tribunales en febrero de 2014 por la pugna por la representatividad empresarial entre Pimec y Foment. Un año más tarde, la patronal de pymes presidida por Josep González se incorporó a la negociación del nuevo AIC que se ratificará en 10 días.