La todopoderosa federación de Metal, Construcción y Afines de UGT, liderada por Carlos Romero, ha dado un paso al frente al proponer a Josep Maria Álvarez como sustituto de Cándido Méndez al frente del sindicato estatal en el congreso del próximo marzo.
Romero ha manifestado en una rueda de prensa que aún no cuenta con el visto bueno de líder en Cataluña durante los últimos 25 años. Este es su principal problema, en un momento en el que UGT levanta la bandera de la renovación, el metal propone renovar a un secretario general que ha estado 20 años en el poder con una persona cuya trayectoria en una comunidad con mucho peso en la confederación cuyo mandato supera en cinco años el de Méndez.
Fusión de federaciones
Para Romero, esto no es un problema. Considera que es un valor a reivindicar. “Es la persona que reúne todos los perfiles que el sindicato necesita para asumir este nuevo tiempo”, indicó.
Es decir, ejecutar la fusión de federaciones planteada a nivel estatal que después se deberá copiar en las organizaciones territoriales que aún no las apliquen. También remarcó que la candidatura de Álvarez cuenta con el apoyo de “otras federaciones”.
Álvarez, el arquitecto de la fusión
Álvarez es, precisamente, uno de los arquitectos de la nueva estructura de UGT en la que en lugar de seis grandes federaciones sólo habrá tres. El metal se unirá con la química y la agroalimentación, principalmente, en la gran federación de industria. Existirá otra de servicios públicos (FSP, enseñanza y FETE) y una de servicios privados (transporte, comercio y SMC).
El congreso estatal se celebrará entre el 9 y el 12 del próximo marzo.