La convocatoria actual, a la que se han presentado dos millones de solicitantes para un total de 938.000 plazas, podría acabar con las ganas de repetir de muchos de ellos, algo frecuente según el Imserso.
También pondría en entredicho diversos estudios del organismo dependiente de Sanidad que aseguran que los participantes mejoran su calidad de vida y su estado de ánimo, lo que reduce la consultas médicas y el consumo de medicamentos.
Matilde Fernández
El programa de vacaciones del Imserso venía funcionando hasta ahora como un reloj desde que fue instituido por la ministra socialista Matilde Fernández hace 27 años. Desde entonces suma unos más de 15 millones de beneficiarios.
Seguramente aquel Ejecutivo de González compartía con el actual de Rajoy un objetivo no confesado de captar el voto de la tercera edad. Pero fue el primero que permitió unas vacaciones a muchos beneficiarios de la tercera edad que jamás habían soñado.
Hoteles desocupados
De paso ayudó a crear puestos de trabajo en el sector servicios y permitió que el gremio de la hostelería se beneficiara de la iniciativa evitando el cierre de los establecimientos, al llegar el otoño como solían hacer anteriormente. Actualmente participan más de 300.
Los expertos consideran que el programa es un negocio redondo para el Estado. De cada euro que invierte recupera 1,56 euros, ya que el cobro del IVA le beneficia y elude pagar el desempleo a 13.000 trabajadores, los que perderían su trabajo si los hoteles, sin clientes del Imserso, tuvieran que cerrar sus puertas en temporada baja.