Soria desvela en un desliz que la inversión de Volkswagen depende de ayudas públicas

El ministro de Industria, José Manuel Soria, ha desvelado en un desliz este viernes que las inversiones de 4.200 millones de euros que Volkswagen comprometió el pasado mayo para España están vinculadas a las concesión de ayudas públicas. Es más, según su relato en una entrevista en la cadena Cope, incluso parte de este paquete de inversión podría tener su origen en el capital público.

¿Eran éstas las condiciones iniciales del plan? Hasta la fecha, nadie del grupo Volkswagen ni del Gobierno había señalado que fuese en este sentido. Y eso que el anuncio de la lluvia de millones de la marca alemana la realizó el propio jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, en el salón del automóvil de Barcelona. Es más, también fue el líder de PP el que detalló que del montante total de la inversión, 3.300 irían a parar a la sede central de Seat en Martorell (Barcelona) para renovar las líneas de montaje e impulsar el departamento de I D; y los 900 restantes se los llevaría la planta de Volkswagen en Landaben (Navarra).

Malestar en las cúpulas

Fuentes del grupo de automoción en España reconocen que el patinazo de Soria ha provocado malestar en la cúpula de las empresas. Tanto en la de Volkswagen España como en la de Seat. Incluso, en la dirección de Alemania.

Primero, porque Soria ha sacado pecho en antena de un encuentro con el presidente de la corporación, Matthias Müller, que se celebró en el headquarter de Wolfsburg y era secreto. Y después porque se debía desarrollar una estrategia de comunicación conjunta entre la compañía y el grupo alemán para hacer público el anuncio que el ministro se ha saltado.

 A ello se le suma que el ministro había manifestado dos días antes de trasladarse a Alemania que no había podido hablar con los responsables de la compañía, algo que los mismos interlocutores aseguran que no es verdad.

¿Compromiso con elecciones el 20D?

El anuncio de Soria también ha incrementado la incertidumbre de la plantilla de Seat, que sólo en Cataluña emplea de forma directa a 14.000 personas. El presidente del comité de empresa, Matías Carnero, señala que el compromiso del ministro de inyectar capital público para desarrollar el I D del grupo de automoción se puede quedar en el aire si se tiene en cuenta que el 20 de diciembre se celebrarán las elecciones generales.

Asimismo, indica que sienta un mal precedente en el sector al vincular una inversión privada a la concesión de una ayuda pública. Más cuándo el grupo que la reclama está en el ojo del huracán por las consecuencias de la falsificación de las emisiones de un motor diésel en 11 millones de vehículos en todo el mundo, 683.262 de ellos en España; el diéselgate.