La reforma de la Ley General Tributaria que el Gobierno ha realizado para agrupar en una lista los morosos con Hacienda no podrá ser publicada en ningún motor de búsqueda de Internet. De esta forma, la publicidad de los ciudadanos con cuentas pendientes con la Agencia Tributaria anunciada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy será mucho más limitada de lo anunciado.
La reforma entrará en vigor en 18 días y la principal novedad era, precisamente, que permitía conocer los litados de obligados tributarios con deudas y sanciones pendientes superiores a un millón de euros que no hayan sido pagadas en el plazo de ingreso voluntario. La única excepción era que se encuentren aplazadas o suspendidas.
Desaparición del listado en tres meses
La negativa a que los nombres de los grandes evasores aparezcan en Google o buscadores similares también impedirá que se publiquen en el Boletín Oficial del Estado (BOE), ya que este indexa en los buscadores de Internet.
El redactado de la reforma señala que la publicación de la lista se efectuará por medios electrónicos “debiendo adoptarse las medidas necesarias” para que no lleguen a los motores de búsqueda. Otra salvedad a la transparencia de la que inicialmente se hizo gala es que pasados los tres meses, los listados de defraudadores dejarán de ser accesibles.
Primera publicación, en diciembre