El presidente de Seat, Jürgen Stackmann, intenta desde hace tiempo mantener a la compañía al margen del procés. No quiere que la automovilística del Grupo Volkswagen (VW) se pronuncie ni a favor ni en contra de la independencia, a pesar de que reclame “estabilidad” en Cataluña para poder ejecutar sus planes de futuro, que pasan por invertir 3.300 millones de euros y lanzar al mercado cuatro nuevos modelos en dos años, la mayor ofensiva de producto de la historia de la firma.

“Nuestra posición es muy clara. Somos una firma de automóviles global que no se implica en política”, manifestó el ejecutivo alemán este martes a la prensa tras ofrecer una conferencia sobre la marca en Esade.  

Primera industria de Cataluña

¿De verdad la principal industria de Cataluña se mantiene al margen del debate independentista? Más bien desde la central de VW en Wolfsburg (Alemania) no aprecian que la secesión sea una alternativa real y se da por descontado que se llegará a un acuerdo entre el Ejecutivo catalán y el central.

Stackmann aseguró que la firma esperará a los resultados del fin de semana para tomar ninguna decisión sobre su futuro. Al ser preguntado por si la deslocalización de la producción y la salida de Cataluña era una opción que estaba sobre la mesa, el presidente de Seat manifestó cortante: “No respondo a tonterías”.

Para VW, lo único que se puede reclamar a cinco días de las elecciones es estabilidad.