Mediapro, la empresa de la que es socio de referencia Jaume Roures, ha emitido un comunicado en el que carga contra Prisa en el que le acusa de no querer “sentarse a negociar” en el litigio abierto entre ambas compañías por el contrato firmado en agosto de 2012 sobre la adquisición de los derechos de futbol.

El grupo ha cargado las tintas tras la sanción establecida por la Corte Internacional de la Cámara de Comercio de París en la que obliga a Mediapro a devolver 32 millones de euros a Distriuidora de Televisión Digital, Canal --ahora propiedad al 100% de Telefónica-- por exceso de coste en la compra de los derechos de emisión de partidos de Liga y Copa durante las temporadas 2012/13, 2013/14 y 2014/15.

París da la razón a ambos

El grupo de Roures indica que la multa supone “ajustes mínimos” respecto a las cantidades iniciales reclamadas y si se tiene en cuenta que el valor total del contrato suma unos 2.460 millones de euros. La compañía considera que si Prisa “se hubiese sentado a negociar el cierre económico de cada temporada en lugar de, unilateralmente, dejar de pagar las cantidades que estaban pactadas con Mediapro” se hubieran ahorrado los costes de un litigio iniciado en 2013.

Señala que el Tribunal de arbitraje de París ha atendido las consideraciones de las dos empresas. A Prisa le da la razón en las cuentas de dos temporadas y a Mediapro en el cierre de la tercera.

Intereses por los impagos

“Asimismo, la resolución condena a Prisa al pago de los intereses por sus repetidos impagos de la temporada pasada", añade.

Mediapro también carga contra el accionista mayoritario por no haber acatado la “sentencia del Tribunal Supremo del pasado febrero”. La cotizada presidida por Juan Luis Cebrián no ha hecho ninguna referencia al laudo a su favor en el tribunal internacional.