El pueblo temático de Santa Claus ha dado carpetazo a sus problemas económicos con una operación societaria. El mayor operador turístico de Escandinavia, Lapand Safaries Group, ha tomado una participación mayoritaria de la compañía que se encarga de gestionar el principal imán de visitantes de Finalandia, la empresa Dianordia, en quiebra técnica.
Los detalles económicos de la transacción no se han difundido. Lapand Safaries se ha centrado en asumir la deuda que había dejado al borde de la quiebra a Dianordia. La principal, unos 200.000 euros de impuestos pendientes de devengar.
Dimensión de la compañía
La dimensión del nuevo propietario del pueblo que celebra la Navidad todos los días del año facilitará que cuadren las cuentas a pesar de la caída de turistas de España, Italia, Grecia o Rusia, hecho que propició la fallida técnica de su predecesor.
Junto a Lapand Hotels, la dirigida por Jyrki Niva conforma la corporación de viajes privados más grande de Finlandia. Registra unos 150.000 clientes anuales, su plantilla alcanza las 900 personas y inaugurará el próximo otoño nuevos hoteles en las localidades de Oulu y Tampere. “Queremos servirnos de nuestra trayectoria en la creación de experiencias y convertir la oficina de Santa Claus en una atracción aún más mágica”, indicó el principal ejecutivo de la empresa en un comunicado.
Ofertas más atractivas
“Mediante esta adquisición queremos asegurarnos de que tanto Papá Noel como el cuento de la Navidad continúen, evolucionen y sigan vivos en la aldea de Santa Claus”, añadió el gestor de Lapand Safaris.
Plantean “colaborar con otros operadores de la región”, con los que ya trabajan o forman parte de las ofertas turísticas que comercializan en todo el mundo, para mejorar la experiencia de los viajeros y hacer más rentable el pueblo de la Navidad.
Apoyo de la Administración
La operación cuenta con la bendición de la Administración de Finlandia, preocupada por el impacto económico que hubiera podido representar que Santa Claus cerrara la puerta. “En Rovaniemi somos conscientes de la importancia que tiene para nosotros el turismo vinculado a la Navidad; y esta adquisición nos ayuda a desarrollarlo incluso más”, manifestó el alcalde del municipio, Esko Lotvonen.
La oficina de Papá Noel en la Laponia finlandesa está abierta todos los días del año y se puede visitar de forma gratuita. Recibe más de 300.000 visitantes de todo el mundo al año y la facturación alcanza los 1,8 millones de euros.