La evolución de la economía catalana se ralentiza al cierre del segundo trimestre. El avance del PIB hasta junio ha sido del 0,9% frente al 1,1% del arranque del ejercicio, según los datos publicados este jueves por la consejería de Economía. Estas cifras sitúan el crecimiento de la actividad de Cataluña por detrás de la del resto de España, cuyo avance llegó al 1% en el mismo periodo, tal y como indica el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En el primer trimestre del año las diferencias fueron a la inversa: el PIB catalán creció el 1,1% y el del conjunto del Estado el 0,9%. Ambos indicadores cerraron 2014 con el mismo avance, el 0,7%.
Avances anuales
La pérdida de liderazgo de la economía catalana, tradicionalmente por delante de la media estatal, también se refleja en las previsiones para el conjunto del año.
La Generalitat estima que el PIB crecerá el 3,2% al final del ejercicio, dos décimas por encima de la tasa interanual del cierre del segundo trimestre; mientras que el Banco de España y el Gobierno indican que el nacional llegará al 3,3% (así consta en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado). BBVA rebaja el avance al 3,2% y el FMI lo deja en el 3,1%, la cifra que el departamento liderado por Andreu Mas-Colell destaca en su informe trimestral de coyuntura económica.
Recuperación de la construcción
El sector que más crece en la economía catalana en el segundo trimestre es el de la construcción. Concretamente, el 5,5%. Encadena tres meses en positivo, algo inaudito desde que empezó la crisis, gracias al inicio de obras nuevas y la recuperación de la licitación pública. Con todo, no se puede decir que tenga un impacto destacado en el cómputo global del PIB porque se partía de un nivel muy bajo de actividad.
Los servicios son de nuevo el principal motor de Cataluña, cuyo avance llega al 3,2% interanual (tres décimas más que el primer trimestre). El turismo se consolida como principal actividad. La oferta local, especialmente la de Barcelona, ha atraído al 4,4% más de visitantes extranjeros. Le sigue el comercio, el principal beneficiario de la recuperación de la demanda interna.
Las exportaciones crecen el 5,6%
La Generalitat indica que la fase expansiva se sustenta en el propio consumo de los catalanes, pero matiza que, a diferencia del trimestre anterior, “también colabora el sector exterior gracias al buen ritmo de las exportaciones (crecen el 5,6% hasta mayo) y a la contención del ritmo de crecimiento de las importaciones (avanzan el 4,2%)”.
El estudio macroeconómico también destaca que los “indicadores de clima y confianza empresarial ponen de manifiesto que las expectativas de las empresas y la marcha de los negocios se mantienen favorables, hecho que presenta un panorama favorable al crecimiento”.
Sólo detecta una incertidumbre que puede afectar a la situación: la crisis griega. No hace ninguna mención a los posibles efectos adversos del proceso independentista, una alerta que sí se ha lanzado desde la patronal Foment del Treball y la Cambra de Comerç de Barcelona, avalista hasta la fecha del envite soberanista liderado por Artur Mas.
Dinamismo industrial
El dato que más destaca la Generalitat del informe trimestral es el avance del 1,4% del valor agregado bruto (VAB) de la industria, dos décimas por encima de los datos del inicio del ejercicio y un punto más que el del cuarto trimestre de 2014.
El dinamismo se apoya en la producción de equipos eléctricos, ópticos, productos minerales no metálicos y caucho y plástico. No aparecen aquí las ramas de actividad tradicionalmente más fuertes en Cataluña: productos farmacéuticos y materiales de transporte. De hecho, esta actividad es la que más baja de todo el sector, pasa de un crecimiento del 8,5% a una depreciación del 2,7%.
Bajan los costes laborales
Contribuye al avance industrial que los costes laborales unitarios están dos puntos por debajo de la media de la Zona Euro. Bajaron el 0,3% en el primer trimestre, aunque el coste salarial ordinario crece por primera vez después de dos años de retroceso.
La afiliación de la Seguridad Social en Cataluña hasta junio creció el 3,4% y el paro llegó al 19,1% en el segundo trimestre, “la más baja en casi cuatro años”, sentencia la Generalitat.