La Bolsa de Atenas ha firmado un descenso historico en la primera sesión tras pasar cinco semanas cerrada. El selectivo heleno se ha apuntado una caída del 16% al final del día, dejando atrás las cifras de hasta el -23% que se habían registrado a primera hora de la mañana, las más bajas desde que existen registros del índice. Ha cerrado en 668,06 puntos.
Al final, las restricciones impuestas entre los operadores locales no han conseguido mitigar el día negro en el parqué griego. La banca ha sido la peor parada de toda la negociación. Los inversores han deshecho posiciones y los títulos del National Banl of Greece y el Piraeus Banz han reculado el 30%.
Poco impacto en el resto de mercados europeos
Los analistas esperaban fuertes descensos el día del retorno de la actividad a la bolsa ateniense, por lo que indican que el contagio en el resto de mercados del continente es menor.
A media tarde, el índice EuroStoxx 50 presentaba un descenso del 0,28% y la bolsa de Frankfurt caía el 0,29%. El parqué que registraba un mayor avance era el alemán, el DAX crecía el 1,07%. Le seguía el Íbex 35, con un avance del 0,71%; y el francés CAC 40 ( 0,60%).
Descenso esperado
La Bolsa de Atenas celebró su última sesión el viernes 26 de junio e, igual que la banca helena, no retomó la actividad el lunes siguiente por orden del Gobierno de Alexis Tsipras.
La convocatoria del referéndum sobre los recortes que se les pedía desde Europa (en el que se impuso el no) propició la imposición de controles de capital. Tras el pacto con Bruselas, la banca del país ha recuperado parte de la actividad, a pesar de que se mantienen ciertos límites como la retirada de efectivo.