El Gobierno griego podría pedir 24.000 millones de euros en un primer tramo de rescate a los acreedores internacionales en el mes de agosto, para sanear sus bancos y pagar las deudas con el BCE que están a punto de vencer, según ha informado este sábado el periódico griego Agvi.
Atenas está teniendo en la actualidad conversaciones con la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para conseguir un rescate de hasta 86.000 millones. Éste será su tercer rescate desde 2010.
Quince días de plazo
El diario Agvi, afín al partido de izquierdas gobernante Syriza, Atenas espera concluir las conversaciones con los acreedores para mitad de agosto.
El primer tramo de 24.360 millones sería utilizado para canalizar 10.000 millones como una recapitalización inicial para los bancos griegos, 7.160 millones para pagar un préstamo puente de emergencia y 3.200 millones para los bonos griegos retenidos por el BCE y otros pagos.
Los bancos podrían necesitar 25.000 millones
Se estima que los bancos griegos podrían pedir hasta 25.000 millones para recapitalizarlos, un déficit que ha empeorado debido a la salida de capitales cuando Atenas se vio amenazada por la llegada a un callejón sin salida con los acreedores en la Eurozona.
A cambio de la financiación, Grecia ha aceptado reformas entre las que se encuentra hacer cambios significativos en materia de pensiones, subir el impuesto sobre el valor añadido (IVA), ajustar su sistema de negociación colectiva, adoptar medidas para liberalizar su economía y limitar el gasto público.
Otro anticipo
Si las conversaciones no llegan a completarse a tiempo, Bruselas tendría que proporcionar más financiación temporal de la que pretendían con el préstamo puente de julio, aunque según Agvi, posiblemente esto no se discutió con los acreedores.
En cualquier caso, el país vuelve lentamente a la normalidad. El lunes reabre la Bolsa de Atenas, que ha permanecido cerrada porque las tensiones no permitían el normal desarrollo de sus sesiones.