El FMI, que oficialmente ha apoyado el duro plan de la Unión Europea para Grecia, reitera en un nuevo informe el análisis que diera a conocer el 2 de julio en el que sostenía que Grecia necesita una quita de su deuda, además de una carencia en su pago. Asegura que la deuda pública del país es "altamente insostenible" y reconoce que las medidas necesarias "van más allá de lo que Europa se ha mostrado dispuesta a considerar".

"La financiación necesaria hasta finales de 2018 está calculada en 85.000 millones de euros, y se espera que la deuda se incremente hasta cerca del 200% del PIB en los próximos dos años", señala.

El último año, definitivo 

El fondo entiende que la insostenibilidad de la deuda "se debe a la laxitud en las políticas durante el último año, con el reciente deterioro del ambiente financiero y macroeconómico a causa del cierre del sistema bancario".

Un alto cargo del FMI ha indicado en declaraciones a la agencia británica de noticias Reuters que los acreedores internacionales deben rebajar la cantidad que se les debe o dar a Grecia un periodo de gracia de hasta 30 años.

"Tenemos que dejarlo claro (...) necesitamos una solución concreta y ambiciosa para el problema de la deuda. No creo que esto sea un truco o patear la lata más lejos (...) Si se les dan 30 años de gracia se les permite reducir la deuda consiguiendo algo de crecimiento", afirma.