Pensamiento

Resultados de la banca: los números cantan

12 febrero, 2016 00:00

Con independencia de decepciones, extraordinarios, pequeñas sorpresas, explicaciones de todo tipo para argumentar los beneficios y provisiones por aquí y por allá, los resultados de la denominada gran banca, que acaban de presentarse, son los que son y, en ningún caso, son para tirar cohetes, ya que el que más o el que menos vuela con plomo en las alas y eso hace a las entidades vulnerables e incapaces de alcanzar una velocidad de crucero.

En ese entorno todavía difícil y sufriendo las magulladuras de la crisis y las incertidumbres internacionales, la banca española --Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Popular y Sabadell-- ganó en 2015 11.276 millones de euros. Esto supone un crecimiento medio del 7,3% sobre el ejercicio anterior, lo que no aporta gran cosa, como lo demuestra el hecho de que el Sabadell duplicara su beneficio --un 90,6%-- gracias a la integración del banco británico TSB Banking Group, que pasó a formar parte de la entidad catalana en junio.

Los resultados de la denominada gran banca son los que son y, en ningún caso, son para tirar cohetes, ya que el que más o el que menos vuela con plomo en las alas

Por encima de los porcentajes de crecimiento de las ganancias, los cuales encierran multitud de variables, lo que realmente resulta llamativo es que, del total de los beneficios conseguidos por los seis grandes, más de la mitad --el 53%, con 5.966 millones de euros-- los aporta el Santander, lo que dice mucho del tamaño de la banca española.

Al banco cántabro, en su primer año sin Emilio Botín a la cabeza, le siguen BBVA, con 2.642 millones; Bankia, con 1.040; CaixaBank, con 814; Sabadell, con 708; Bankinter, con 376, y Popular, con 105. Como decía un analista, todavía se podrían incorporar los resultados de algunos de los siete enanitos para equilibrar la balanza.

Elevando el foco para analizar la evolución de los dos grandes bancos españoles y colocándolo en el principio del siglo XXI, se comprueba que los beneficios consolidados con los que el hoy Santander (BSCH) entró en el siglo superaban los 1.575 millones de euros, mientras que los del BBVA (BBV entonces) subían por encima de los 1.230 millones. Hoy esa diferencia se ha más que multiplicado por dos, lo que pone de relieve que el modelo Botín --aunque la heredera confiese pecados, como que hasta octubre pasado no era clienta del Santander España (había sido de Santander UK y de Banesto)-- funciona más y mejor que el del banco de Francisco Gonzalez y su quimérica digitalización.