Antonio Asensio Mosbah, empresario y editor del Grupo Zeta / FOTOMONTAJE DE CG

Antonio Asensio Mosbah, empresario y editor del Grupo Zeta / FOTOMONTAJE DE CG

Business

La banca exige al Grupo Zeta que se desprenda de activos por valor de 72 millones

Deloitte aconseja que el producto de la venta de Ediciones B se destine a aminorar los 38,4 millones del nuevo crédito, que se sumará a la deuda de 99,2 actuales

10 abril, 2017 00:00

El Grupo Zeta deberá desprenderse de activos por valor de 72,1 millones de euros si quiere que la banca reestructure su deuda de 99,2 millones. Adicionalmente, el pool bancario le abrirá una nueva póliza de 38,4 millones (no los 25 que había pedido el grupo) para acometer el plan de negocio elaborado por Deloitte y que abarca los ocho años que van de 2017 a 2024.

De esta forma, el endeudamiento del holding editor pasará de 99,2 millones a 137,6 millones, pero con una gran diferencia. El plan que había diseñado la dirección de Zeta cuando reclamó reestructuración y 25 millones adicionales dejaba el 53% de la deuda total en el aire (“no recuperable”, en términos financieros), mientras que el diseño de la consultora limita ese riesgo cierto al 29%. La deuda del grupo está contraída con 10 entidades bancarias, siendo Caixabank, Popular y Sabadell los que tienen más riesgo.

La liquidación no es una opción

Los técnicos que han reelaborado los números del grupo han informado a la banca de que el camino más eficaz para recuperar su dinero es reestructurar la deuda, puesto que una hipotética liquidación del grupo les originaría enormes pérdidas. Sería una quiebra que no cubriría ni de lejos los compromisos adquiridos.

El primer paso consistiría en vender los diarios de Aragón, Extremadura y Badajoz, así como las plantas de impresión de Parets, Córdoba y Alicante. También proponen liquidar las revistas no rentables y vender el resto a editoriales que puedan mejorar su rentabilidad.

Cuatro cabeceras a salvo

Deloitte recomienda mantener las cabeceras de El Periódico de Catalunya, Sport, Mediterráneo y Córdoba, si bien hace una serie de recomendaciones de hacia dónde deben dirigir su política editorial y cómo acentuar el contenido digital de las mismas.

Curiosamente, el informe --fechado a 5 de abril-- recomienda la venta de la unidad de negocio de libros, Ediciones B, una empresa cuya venta a Penguin Random House fue anunciada el 8 de abril. Deloitte la valora en 24 millones, bastante por debajo de los 40 que se dijo y más cerca de lo que sería un cálculo realista en función de sus ventas. El pacto incluye dejar la editorial muy limpia de plantilla, donde ahora figura un centenar de personas; es decir, que el monto de la venta no será neto.

El informe de los especialistas cita a varios posibles compradores de Ediciones B, pero ninguno de ellos es el que finalmente se hizo con la marca. 

Los consultores advierten de que el resultado de cualquier venta de este estilo --hecha antes de que se apruebe definitivamente el plan-- debe destinarse a amortizar la nueva financiación.

Dinero para despidos

Deloitte considera que Zeta no necesita los 25 millones adicionales a los que aludían sus directivos, sino 38,4, entre otras cosas, porque no serían 15 millones los necesarios para pagar despidos, sino 23,4, dado que debería prescindir de más directivos de los calculados.

De esas cantidades, a El Periódico solo se destinarían 600.000 euros, lo que podría equivaler a prescindir de ocho personas: la dirección del grupo había propuesto desprenderse de 200 en total –con una indemnización de 75.000 euros por persona-- y contratar a 50 “de perfil digital”, con un coste anual de 2,5 millones.

Los consultores sí proponen un reajuste radical en servicios no estrictamente literario/periodísticos en el caso de El Periódico y el Sport, dado que sugieren externalizar el “servicio de traducción”, donde trabajan 23 personas, y el de fotografía, que cuenta con 30. También centralizar la maquetación (29), archivo (9) y administración (20).